¡Involución!
Isaías Márquez
Insólito e inaudito que en pleno siglo XXI existan grupúsculos o catervas de cierto tipo de organización social de filosofía decimonónica denominada “supremacía blanca” o supremacismo blanco, cuya ideología sostiene que la raza caucásica es muy superior a otras etnias, promoviendo el dominio social y político de los blancos, que según algunos teósofos, fue una raza elegida por Dios para liberar al mundo, la cual surge durante el suglo XIX inspirado por el descubrimiento de la familia de lenguas indoeuropeas, razón por la que etnólogos de aquel entonces indicaron que todos los pueblos europeos de raza blanca eran descendientes de los arios. Y, fue así, como varios movimientos europeos colonialistas y ultranacionalistas acogieron esta idea; en especial, el nazismo alemán, que empleó el concepto de raza aria interpretada como una raza de señores de pueblos de linaje indoeuropeo, a fin de justificar los postulados racistas, de donde, claramente, quedaban excluidos los judíos por su origen oriental (de Canaán).
De ahí, el holocausto en Austerlitz que se caracterizó por el exterminio de millones de civiles inocentes impulsado por una ideología racista que consideraba a los judíos como “indeseables parásitos” dignos solo de erradicación, los nazis implementaron el GENOCIDIO, inmisericordemente. Entonces, eligieron a todos los judíos de Europa, sin excepción alguna; incluso, los niños.
Después de tantos años nos encontramos ante una aberración: “Otro ataque neonazi en USA arroja saldo de unos 11 fallecidos en una sinagoga de Pittsburgh (The Tree of Life)”, en tono inequívocamente racista, sntijudío y antiinmigración del presunto asesino, individuo, de unos 45 años y aspecto caucásico, quien aprovechó el servicio del Shabbat para su cometido antisemitista.
Gracias a Dios los venezolanos, en general, convivimos, igualmente, con el árabe, el turco y el moreno.
