¿LA FAN Deliberante?
Nada más absurdo, que pensar y tratar de justificar el bolivarianismo, el chavismo y la revolución, como conceptos de la FAN. Sin temor a equivocarnos, ni predecir aciagas respuestas, es triste tener que desmentir o quitarle el ampuloso espectro ruinoso y tormentoso, que abruma a nuestra querida Institución, altamente maltratada desde 1998, cuando asumió la presidencia el Tcnel. Chávez, altamente identificado con el no deber ser de todas las instituciones, que hoy sufren el trauma de la desidiosa maldad, de quienes con ínfulas de revolucionarios, quisieron establecer un régimen de gobierno clamorosamente preterido con el dogma del comunismo, tercamente socializado bajo la férula de quien llegara a ser el “comandante eterno” y mentor del hombre nuevo venezolano, que surgiendo del seno de la FAN, se apoderó de la mente de los mandos militares, torpemente engañados por su influencia maligna, atosigante e ignorante. Algo incomprensible, para quienes fuimos testigos y promotores del nuevo militar surgido al término del gobierno de Marcos Pérez Jiménez y luchadores contra la terquedad guerrillera de los 60’.
Hoy, cuando el pueblo despavorido reclama una vuelta atrás, en un intento de volver a lo que fuimos antes de este desastroso gobierno iniciado por quien fungiera como el salvador de la Patria de Bolívar y se creyera el mesías de la salvación, sufrimos el trauma de tener que soportar y tratar de cambiar la mentalidad de los mandos militares, quienes enfrentan a la Asamblea Nacional, luego de avalar y protagonizar los desmanes cometidos durante este gobierno que apoyan y defienden, surgiendo la irracionalidad de querer dar a la FAN deliberancia, confundiendo al militar con la Institución, y a pesar de estar legalmente normada esta restricción constitucional. Nos aturde, cuando el general Padrino se empecina en declarar la tal deliberancia, utilizando subterfugios como el soon politikon aristotélico, poniendo en tela de juicio su capacidad cognoscitiva para entender las restricciones constitucionales. Lo que además nos preocupa, cuando en su defensa de la deliberancia, habla del militar, como si la FAN fuera un conjunto de militares, cuya sumatoria de objetivos, deberes y derechos, se confundieran con los fundamentos de la organización, que solo tiene misión y funciones.
El artículo 328 habla de “…una institución esencialmente profesional, sin militancia política, organizada por el Estado para garantizar la independencia y soberanía de la Nación…”, mientras que el 330 expresa que “Los o las integrantes de la Fuerza Armada Nacional en situación de actividad tienen derecho al sufragio de conformidad con la ley, sin que les esté permitido optar a cargo de elección popular, ni participar en actos de propaganda, militancia o proselitismo político”. Sin dudas, el general Padrino debiera entender, que el militar, por ser ciudadano, es un ser político, mas no deliberante en servicio activo, porque tiene la prohibición constitucional, que no le permite participar en el juego de la política. Sin dudas, es un animal político, entendiendo a Aristóteles, pero la sociedad, para su neutralidad, le prohíbe su participación en la política.
La partidización de la FAN y de los militares por el difunto Chávez y la burda decisión asumida por la Sala Constitucional del TSJ, son demostraciones de debilidad política e intelectual, culpables del deterioro institucional, que debemos revertir.
