Opinión Internacional

Elecciones en España: las encuestas

El último fin de semana antes de las elecciones los españoles recibimos una avalancha de encuestas, realizadas por encargo de casi todos los medios de comunicación. Es conocida la habilidad de la estadística para demostrar cualquier embuste y en España ya poca gente cree en ellas, tras su serie de estrepitosos fallos en las últimas convocatorias electorales.

A mí me gustan. Retratan a quienes las encargan. Por ejemplo, el periódico de la derecha, derecha, de la de toda la vida, el ABC, publica el sondeo que menos votos otorga al PP. Mensaje en clave: no se confíen que estos rojos son capaces de ganar. “El País”, el diario más proclive al PSOE, establece la mayor ventaja a favor del PP, que casi roza la mayoría absoluta.

Todos coinciden en que el PP ha tocado su techo electoral, mientras que la clientela de Izquierda Unida y el PSOE dudan entre quedarse en casa y no votar o apoyar a cualquiera de las dos opciones. Las encuestas buscan movilizar a esa masa de indecisos por la izquierda o amarrar ese techo electoral que si conociera los datos en su totalidad podría dar por conseguida la segunda legislatura de José María Aznar e irse al chalé de la sierra, que es una actividad habitual en el votante medio, de adosado y casita en la sierra, de clase media que apoya a esa medianía de presidente del gobierno.

Claro que esperar que Joaquín Almunia y Francisco Frutos levanten a las masas indecisas para dar la vuelta a las encuestas es como sentarse a esperar que llueva en el desierto.

Estas son unas elecciones de segundones, de hombres sin carisma, y la gente de izquierda, atea ella -¡rojazos!- necesita alguien a quien adorar, como a Felipe, y a Anguita, pero el tiempo y la soberbia acabó con los dos. Y ahora tenemos a Frutos y a Almunia, que parecen aspirantes a jefes de negociado más que a la presidencia del gobierno. ¡Ya sé! Aznar no es mejor, pero a la clase media le gusta alguien que les muestre que ellos pueden ocupar la presidencia del gobierno. Los chicos de “la cosa”, como llama el ocurrente Aznar al acuerdo IU-PSOE, necesitan un líder, un piquito de oro, pero todos están retirados, como pronto lo estarán Almunia y Frutos. Sólo Aznar puede remediarlo. Con su talante y su talento puede conseguir que la izquierda vote y no se quede en casa.

Artículos anteriores de Agustín Madariaga sobre las elecciones españolas:

(%=Link(5921018,»»)%), 8 de marzo de 2000.

(%=Link(7711789,»»)%), 2 de marzo de 2000.

(%=Link(2378614,»»)%), 1° de marzo de 2000.

(%=Link(3839658,»»)%), 29 de febrero de 2000.

(%=Link(5598020,»»)%), 25 de febrero de 2000.

Otros artículos de Agustín Madariaga:

(%=Link(9640851,»»)%), 24 de febrero de 2000.

(%=Link(5492551,»»)%), 23 de febrero de 2000.

(%=Link(1694303,»»)%), 18 de enero de 2000.

Fundado hace 28 años, Analitica.com es el primer medio digital creado en Venezuela. Tu aporte voluntario es fundamental para que continuemos creciendo e informando. ¡Contamos contigo!
Contribuir

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Te puede interesar
Cerrar
Botón volver arriba