EN EL TERRORISMO todos somos objetivos
“Entendemos por terrorismo el propósito de matar y destruir indistintamente hombres y bienes, mediante el uso sistemático del terror con una intención ideológica totalitaria”, así define la Conferencia Episcopal de España al terrorismo. El terror que impone el terrorismo trasciende inclusive los propios hechos de violencia. Es la capacidad del hombre de planificar actos de esta naturaleza en función de un ideal político, religioso o de cualquier contenido. En la mente del terrorista todas las personas son parte de sus objetivos, razón por la cual cualquier muerte se justifica. No es un ataque a los líderes políticos o a los poderes constituidos. Es un ataque a la sociedad, y es allí donde radica el terror del terrorismo.
España ha vivido sistemáticamente la acción violenta, organizada y planificada de la organización independentista vasca ETA (Euskadi Ta Askatasuna, que significa “Euskadi y Libertad) cuyo objetivo desde 1959 era la obtención de la independencia del País Vasco (Euskadi) respecto del Estado español. Se ha convertido en un grupo de individuos que solamente han generado odio, violencia y rechazo entre sus propios compatriotas. Aunque surgió en la dictadura del general Francisco Franco su actividad sigue presente hoy en España y Francia. ETA con diversos frentes en las áreas políticas, económicas y militares ha protagonizado hechos de violencia con la participación de jóvenes que han visto en su ideología una manifestación de protesta y acción política justa. Los gobiernos de Francia y España han pretendido minimizar la capacidad operacional de la ETA, mientras que España ha limitado el área política de la ETA suspendiendo a la organización política Herri Batasuna por las vinculaciones con esta organización terrorista. En su historia más reciente ETA ha establecido varias treguas, las cuales no han cumplido. Precisamente un comunicado de la EA del 18 de Febrero de 2004 señalaba “la suspensión de su campaña de acciones armadas en Cataluña”. No obstante ante las posibilidades que el grupo terrorista Al Qaeda este involucrado en estos hechos, todavía las autoridades españolas no descartan ninguna hipótesis. Pero la experiencia de 30 años de acciones violentas; la detención hace unos días de 500 kilos de explosivo con lo cuales estaban planificando un fuerte atentado en Madrid; la acción de la Guardia Civil el 23 de diciembre de 2003 donde frustraron un atentado que tenía como objetivo la estación de trenes de Chamartín en Madrid; parece indicar que la ETA están vinculados a los atentados pasado del 11 de Marzo. Pero, ¿cómo observar esta realidad desde Venezuela?
La presencia de miembros de la ETA en Venezuela es una realidad. El diario El País (2004, Febrero 14) señala: “El segundo colectivo americano más importante de ETA está asentado en Venezuela. Los expertos antiterroristas calculan una presencia de 30 militantes, de quienes una decena está integrada en el aparato logístico de la banda” (www.belt.es). Recientemente el gobierno de Venezuela ha tomado algunas medidas vinculadas a estas personas que viven en el país, en especial después de una serie de cuestionamientos sobre la lentitud de Venezuela ante esta solicitud realizada desde 1996. El Diario El Mundo de España publicó: “La cooperación venezolana se ha saldado desde enero de 2002 con tres personas entregadas a la Justicia española, todas ellas por la vía de la expulsión administrativa. El Gobierno venezolano expulsó el 2 de junio de 2002 a Juan Víctor Galarza Mendiola, personaje histórico del comando Vizcaya en los años 80, y el 17 de diciembre entregó a Sebastián Echaniz Alcorta, con 20 atentados y 17 muertos a sus espaldas” (2003, Septiembre 24). En algunos casos, según la Asociación Venezolana de Amigos de Euskal Herria, han manifestado públicamente la supuesta violación de derechos humanos por no haber las suficientes pruebas para la extradición.
Recientemente Cofer Black, encargado de la lucha contra el terrorismo en el Departamento de Estado norteamericano, señaló que “Venezuela puede hacer significativamente más de lo que está haciendo”. Lamentablemente el vicepresidente de Venezuela agregó el componente político, José Vicente Rangel, expresó que “es sorprendente una declaración de esta naturaleza” y aseguró que Venezuela comparte la preocupación por la lucha contra el terrorismo, “pero exigimos reciprocidad y queremos que todos los terroristas reciban la sanción correspondiente” haciendo referencia a los hechos ocurridos el 12 de abril de 2002. El planteamiento central es que la lucha contra el terrorismo no debe estar condicionada. En el terrorismo todos somos el objetivo.
