¿Estamos bajo ataque terrorista?
Tendemos a creer que los ataques terroristas siempre son espectaculares, como el 11 de setiembre o el 11 de marzo. Ciertamente, los peores ataques suelen ser discretos pero resultan igualmente demoledores.
En las últimas semanas el pánico financiero ha pasado de ser una sombra a una realidad en Perú. La inundación de dólares falsos, indetectables para los bancos, menos por el usuario común y corriente está causando graves estragos. La noticia se filtró cuando los bancos recibieron una notificación al enviar una remesa de dinero a los EE.UU. La serie CB-B2 2001 ha obligado una rápida actuación del Servicio Secreto de los Estados Unidos.
Hoy, las empresas bancarias enfrentan a indignados clientes que dicen haber recibido el dinero de cajeros automáticos y ventanillas bancarias. El billete es casi perfecto, tanto que muchos expertos fallan al diferenciarlos, inclusive usando detectores y lupas. Ahora parece estar generalizándose el rechazo del dólar americano en Perú. Las principales casas comerciales comenzaron a objetar el domingo dólares de otras series y denominaciones.
Se desconoce con precisión cuantos dólares falsos hay en el mercado y el pánico financiero puede extenderse por otros rincones de América Latina. En Bolivia, los bancos empiezan a rechazar billetes de 100 dólares de la serie CB-B2. El gerente de La Asociación de Bancos Privados (ASOBAN) Agustín Saavedra Weise, dijo que «la medida busca precautelar la seguridad de los clientes».
Hace unos años el traficante de armas, Sarkis Soghanalian apodado “El Mercader de la Muerte” fue detenido en Los Ángeles y logró un provechoso arreglo judicial cuando ofreció al Servicio Secreto, relatarle todo lo que sabía sobre la falsificación de billetes de 20 y 100 dólares, que en ese momento estaba afectando a la economía norteamericana. Estos billetes eran tan perfectos, que todos hemos atestiguado el cambio de estilo del billete por fines de seguridad, y nuevamente en los últimos meses, estamos apreciando otro cambio en el diseño. Lo que quiere decir que no funcionaron las medidas de seguridad que se colocaron en primera instancia.
En aquella época, se dijo que si el mundo conociera la cantidad de dólares falsos que circulan globalmente, la economía norteamericana colapsaría.
Soghanalian confirmó en aquella ocasión que esa no era una falsificación domestica, sino una planeada a escala industrial con apoyo político de una o más naciones con base en Beirut, que operaba para causar desestabilización.
Por lo mismo, valdría preguntarse si este caso en Perú se trata de una súper mafia como se nos ha dicho o se trata de un ataque del terrorismo de Medio Oriente, cuyo objetivo es dañar la economía americana sembrando desconfianza en los países de su influencia.
(*): Site del autor: (%=Link(«http://www.josemusse.com»,»www.josemusse.com»)%)
