Parlamento Latinoamericano, Tribuna Internacional
A lo largo y ancho del Mundo existen una serie de tribunas que permiten a la sociedad en general poder mostrar a la sociedad internacional, sus necesidades, propuestas, peticiones y opiniones acerca de las distintas realidades que determinan el desarrollo de la vida humana en cualquier punto geográfico del planeta, que cada vez necesita más de la comunidad internacional y de sus organismos. Debido al profundo proceso de inmersión en la onda globalizadora, que marca a la integración y la interdependencia como piezas claves para encontrar el camino de evolución y crecimiento de los pueblos en su conjunto.
El Parlamento Latinoamericano (Parlatino) fue creado el 10 de diciembre de 1964 por la Declaración de Lima y posteriormente institucionalizado el 16 de noviembre de 1987, en la ciudad de Lima, Perú. Es un organismo regional, permanente y unicameral. Está integrado por los congresos y asambleas legislativas nacionales de América Latina electas democráticamente, y su sede permanente se encuentra en Panamá. En algunos casos los 12 representantes por la delegación o país, son escogidos por los parlamentos nacionales en equitativa proporción a como están distribuidas las fuerzas políticas que se encuentran presentes a lo interno del aparato legislativo nacional. Pero en otras variantes estos son elegidos por votación directa y universal como sucede en Venezuela, lo que permite a la sociedad en general seleccionar de una gama candidatos sus diputados en estas instancias.
Distintos países de la América Latina tienen ya en este escenario acción y participación. Está integrado desde 2006 por Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras (Expulsado), México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Surinam, Uruguay y Venezuela, además de Aruba y las Antillas Neerlandesas. El parlatino descansa sobre una serie de principios y propósitos que básicamente tienen como fin: la defensa de la democracia, el desarrollo económico, los derechos humanos, la autodeterminación de los pueblos, resolución de conflictos y aplicación de la justicia social, fomento de relaciones internacionales dentro de la región y con otras regiones, incremento de procesos de estudio e investigación, observación electoral, cooperación y vigilancia legislativa de los parlamentos nacionales. Aunque de manera resaltante, según como reza uno de los párrafos de la declaración de Lima, es una «institución democrática de carácter permanente, representativa de todas las tendencias políticas existentes en nuestros cuerpos legislativos; y está encargada de promover, armonizar y canalizar el movimiento hacia la integración».
Hoy en día incluso el Parlamento Latinoamericano forma parte de una de las representaciones de América ante La Asamblea Parlamentaria Euro-Latinoamericana, que fue creada en 2006, habiendo celebrado su Sesión Constitutiva los días 8 y 9 de octubre del mismo año en Bruselas. EuroLat es la institución parlamentaria de la Asociación Estratégica Biregional establecida en junio de 1999 en el contexto de las Cumbres UE-ALC (Unión Europea- América Latina y Caribe). EuroLat adopta y presenta resoluciones y recomendaciones a las diversas organizaciones, instituciones y grupos ministeriales encargados del desarrollo de la Asociación Estratégica Bi-regional.
El Parlatino como las demás instancias internacionales, quizás necesita repensarse, bien sabemos que ni la Naciones Unidas o la Organización de Estados Americanos, solo por colocar dos ejemplos de profunda relevancia, no han pasado por sus mejores momentos ante las diversas crisis internacionales, por ello tribunas como el Parlamento Latinoamericano necesitan hoy más que nunca un baño de apoyo de las democracias presentes en el continente, ya que precisamente una comunidad tan abierta y diversa como lo es la latinoamericana, pero que a su vez conserva una amplia pero muy allegada identidad cultural. Debe reconocer que estos espacios, son en estos momentos más que necesarios y en ciertos casos indispensables, como ya lo hemos visto en algunos capítulos especiales de nuestra historia contemporánea. Por ello, la ciudadanía en su totalidad debe cuidar de las delegaciones allí intervinientes y promover con suma responsabilidad a los representantes que allí van a desempeñar el rol y posición del País en el plano internacional.
Lo mejor a la hora de votar por estos candidatos es observar de manera muy analítica la experiencia y profesionalización en este tipo de responsabilidades, encontrando en el caso Venezolano distintas y múltiples opciones, y solo por mencionar algunas que están ya postuladas: la tendencia oficialista encabezada por Roy Chaderton y Roy Daza, la de la Mesa de la Unidad con Timoteo Zambrano y Henry Ramos Allup, la del Movimimiento Ecológico de Venezuela con Julio Cesar Pineda y Milos Alcalay, entre otras. De cualquier modo bajo estas condiciones, se contara con nuevos diputados ante el Parlatino en la delegación Venezolana.
