Putin promete dura respuesta tras emboscada chechena
Las fuerzas militares de Rusia admitieron el jueves un nuevo revés en la separatista Chechenia, con la muerte de por lo menos 10 soldados en una emboscada, y el presidente electo Vladimir Putin dijo que los comandos contraatacarán con redoblado vigor.
Los rebeldes dijeron que ultimaron a 20 efectivos rusos en un ataque el miércoles por la noche en Serzhen-Yurt, 25 kilómetros al sudeste de Grozny, aunque el total de bajas admitidas por los rusos es la mitad. Moscú ya había reportado la muerte de 15 de sus soldados en una emboscada previa, durante el fin de semana, en la misma población.
Según el general Valery Manilov, primer subjefe del Estado Mayor General de las fuerzas armadas, en la nueva emboscada más de 50 combatientes rebeldes atacaron a una columna del ejército.
«Se enviaron comandos del ejército como refuerzo. Los combatientes se dispersaron y parte de ellos, 17 combatientes, fueron destruidos», dijo Manilov, según la cita divulgada por la agencia de noticias Interfax.
En respuesta, Putin dijo a los ministros que reforzará el número de comandos en las montañas meridionales, donde los rebeldes han intensificado los ataques relámpago contra sus tropas.