Re-amiste
Las FARC han sido detonantes de dos graves crisis entre Caracas y Bogotá a raíz de que fuerzas colombianas en diciembre 2004 capturaron a un líder de éstas en Venezuela y luego en Marzo bombardearon suelo ecuatoriano. En ambos casos los insultos devinieron en abrazos.
Chávez quiere acabar con la violencia colombiana buscando que Bogotá haga concesiones a las FARC a fin que éstas se desarmen y ayuden a que la centroizquierda gane las elecciones. Uribe requiere imponer mano dura (aunque solo aminore y no elimine a la guerrilla) pues ello le da popularidad para imponer un programa de seguridad e incentivos al ‘libre comercio’.
Hoy ambos se re-amistaron y tuvieron una reunión secreta. Uribe le agradece a Chávez por su giro hacia demandar que las FARC libere a los rehenes ‘a cambio de nada’ y porque él debe estar influyendo en que un ala de la guerrilla vaya queriendo liberar secuestrados. Chávez desea revertir la tensión con su vecino para mejorar la economía y la paz interna de su país, mientras que él quisiera que la Betancourt vaya impulsando una alternativa centrista de recambio.