Opinión Internacional

Semana crucial

Mañana, sábado 15 de noviembre, comienza en Washington la reunión cumbre que ha convocado el Presidente George W. Bush con mandatarios del denominado grupo de los veinte y adonde se ha invitado, con argumentos difusos y poco válidos, al Presidente de Gobierno de España, José Luís Rodríguez Zapatero.

La crisis financiera, de alcances mundiales, ha estallado cuando los mercados no han atendido las señales de alarma que desde hace algunos, muchos meses, se vienen activando.

Tenemos temor. Abrigamos un sentimiento extraño pues pensamos que los políticos se han decidido a actuar en un campo donde no tienen la menor experticia.

El mundo de las instituciones financieras es un mundo muy complejo y solo aquellas personas que han dedicado muchos años de estudio y de actuación en ese primordial capítulo del acontecer mundial, pueden actuar con el mejor control de las variables en juego.

Hace unas pocas semanas anotábamos en estas páginas tres elementos fundamentales entre los que creemos, causaron la crisis.

La ética y la moralidad de muchos banqueros, los abusos cometidos en aras de la llamada ingeniería financiera y los parachoques dorados de los altos ejecutivos de las empresas, creemos que conforman el caldo de cultivo donde se desarrolló la catástrofe.

Recordamos las prescripciones de prudente administración bancaria aprobadas en Basilea en los primeros años de la década de los noventa. Sin pensar que allí se encontraba la panacea, estamos convencidos de que dichas prescripciones constituían un marco propicio para la sanidad de los bancos y de las instituciones relacionadas.

La supervisión de esas instituciones, tanto por parte de sus accionistas, como, mucho más importante, por parte de las autoridades nacionales especializadas, ha sido muy débil. Un Estado como el venezolano, que posee y administra una grosera tajada del mercado bancario nacional, ejerce una supervisión absolutamente deficiente. Entre otras cosas, sostiene una doble actitud, ante los bancos privados y ante los que maneja, a su leal ignorancia, el gobierno de la nación.

Los países tienen los recursos necesarios para ejercer una supervisión adecuada y eficiente. Las universidades preparan a jóvenes que están capacitados para revisar adecuadamente la actuación de las empresas bancarias. Las denominadas superintendencias son capaces de escudriñar los más recónditos intersticios de los libros donde reposan los comprobantes de las operaciones entre las empresas y sus clientes. Los auditores invierten mucho tiempo y les cuestan mucho dinero a los accionistas, que deben resultar en informes que describan, con la mayor precisión, la situación real de cada empresa. Las Asambleas de Accionistas deberían ser meticulosas a la hora de analizar y aprobar las cuentas de sus administradores.

A manera de ejemplo de las causas que producen nuestro temor, vamos a mencionar una de las últimas decisiones del gobierno español en aras de paliar los efectos de la crisis.

El gabinete del Presidente Rodríguez Zapatero ha prescrito una gracia para quienes estén desempleados y tengan una carga hipotecaria sobre su vivienda principal. Le han concedido, que mientras estén en esa situación y por un lapso de tres años, pueden pagar solo la mitad de las cuotas hipotecarias contratadas. Nos surgen algunas preguntas.

Si se tiene dificultad en cancelar las cuotas actuales, ¿De donde saldrá el dinero para poner al día esas cuentas que tienen una mora inducida hasta por tres años?

¿Cómo contabilizan los bancos esas cuentas morosas?

¿De donde sale el dinero que balancea dichos préstamos?

¿Se constituye el Estado Español en fiador y principal pagador ante el evento de un fracaso de cada uno de dichos créditos?

De buenas intenciones está el mundo lleno y los políticos tiene la facultad de ser muy generosos con los dineros ajenos, pero los banqueros tienen que responder ante sus depositantes. Tenemos mucho temor y mayores reservas. Ojalá nos equivoquemos.

Fundado hace 28 años, Analitica.com es el primer medio digital creado en Venezuela. Tu aporte voluntario es fundamental para que continuemos creciendo e informando. ¡Contamos contigo!
Contribuir

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Te puede interesar
Cerrar
Botón volver arriba