Opinión Internacional

¿Visita de Estado o turismo presidencial?

Mientras a los venezolanos nos limitan la adquisición de divisas y a
estas alturas ni siquiera sabemos si podremos contar con los 2.500
piches dólares anuales que «generosamente» nos asigna el régimen, el
presidente recibe 800.000, léase bien: OCHOCIENTOS MIL dólares, para
su viaje a Argentina acompañado de sus hijas y sus nietos.

Esa suma, que por supuesto, no abarca los gastos de viaje de los 120
miembros del cortejo que le acompaña, viene a agregarse a los más de
16 millones de dólares que, según la cuenta que lleva Carlos Eduardo
Berrizbeitia, ha costado la viajadera del teniente coronel presidente
en lo que va del año.

Haciendo honor a su consigna de que ser rico es malo, y en una
demostración más de su odio hacia todo lo que tenga que ver con el
capitalismo salvaje, el teniente coronel presidente modestamente se
alojó en la suite presidencial del Hotel Sheraton de Buenos Aires.

Pero lo insólito es que una visita de Estado a la Argentina se haya
convertido en una gira turística. Según el diario La Nación de Buenos
Aires, el teniente coronel fue a cumplir «con la reiterada invitación
de los Kirchner a visitar su (de ellos) lugar favorito en Santa Cruz».

Cumplidas las formalidades oficiales necesarias para justificar el
viaje, incluida la conclusión de varios acuerdos de tercer orden que
no requerían la firma y mucho menos la presencia de los Jefes de
Estado, el teniente coronel viajó, acompañado de sus hijas, sus
nietos, sus anfitriones y su comitiva al Calafate, una localidad de
23.000 habitantes situada en la Patagonia argentina, en la proximidad
del Parque Nacional los Glaciares. Para el traslado de la comitiva
real, perdón, presidencial, el gobierno argentino movilizó cinco
aviones entre oficiales y privados. En el Calafate el teniente coronel
presidente se hospedó en la Hostería-Posada cinco estrellas «Los
Álamos» donde ocupó la misma suite que años antes habían utilizado el
rey Juan Carlos y la reina Sofía. Seguramente no pudo dormir en toda
la noche pensando que en la misma cama donde estaba acostado había
dormido el autor de aquel famoso «¿Por qué no te callas?
El diario La Nación proporcionó los detalles de la vacación -bien
merecida después de tantos fatigosos (sobre todo para nosotros)
maratones televisivos- del teniente coronel presidente en la
Patagonia:
«Cristina y Néstor homenajearon a Chávez con una cena organizada en
uno de los tres restaurantes del hotel que cuenta con 120 cubiertos,
pero que anoche lució dispuesto exclusivamente para los 70 comensales
invitados, según el pedido presidencial». «La mañana del sábado Chávez
se dirigió con su familia hacia el Parque Nacional Los Glaciares
acompañado por el gobernador santacruceño, Daniel Peralta. La visita
incluyó una caminata por las pasarelas frente al famoso glaciar Perito
Moreno y un paseo en catamarán en una jornada de intenso frío y nieve
en esta zona de la Patagonia, a unos 3.000 km al sudoeste de Buenos
Aires».

Evidentemente, de esa manera la pareja presidencial argentina, muy
modestamente, ha reciprocado y testimoniado su agradecimiento por la
generosa munificencia que ha tenido hacia ellos y hacia su país el
teniente coronel presidente sin olvidar, por supuesto, aquellos -el
mismo Antonini Wilson asegura que fueron más de uno- famosos maletines
repletos de dólares.

Esto sucede justo cuando los venezolanos estamos sometidos a severas
restricciones y medidas de austeridad para hacer frente a la crisis
económica mundial y sobre todo la nacional, resultante de la
ineficiencia, la corrupción y el mal gobierno, que ya afecta
seriamente al país sin que todavía hayamos comenzado a sentir sus
verdaderos impactos.

«La visita al sur del país, se produce luego de que ambos mandatarios
renovaron sus lazos estratégicos». «Con esas frase cerró el diario La
Nación su descripción de la gira turística al Calafate. Una manera muy
elegante y sutil de poner de relieve el cinismo y la hipocresía que
rodea esa supuesta alianza estratégica.

Seguramente en el próximo viaje de Cristina a Venezuela el teniente
coronel presidente la llevará a Canaima, a Los Roques o a Margarita
para dar continuidad a esta nueva modalidad de visitas de Estado
turísticas.

¡Qué rico es ser el «presidente pobre» para quien ser rico es malo y
los ricos no son seres humanos sino animales con forma humana! ¡Que
rico es hacer turismo a costa del erario público!

Fundado hace 28 años, Analitica.com es el primer medio digital creado en Venezuela. Tu aporte voluntario es fundamental para que continuemos creciendo e informando. ¡Contamos contigo!
Contribuir

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Te puede interesar
Cerrar
Botón volver arriba