Opinión Nacional

¡Adelante su Excelencia!

En los últimos días hemos podido seguir, con orgullo venezolanista, las declaraciones de Su Excelencia Cardenal Castillo Lara llamando al “pan, pan y al vino, vino”. Es una postura que nos deja conocer las cualidades que adornan el caracter de este destacado representante de la dignidad venezolana. Ahora entendemos porqué la sabiduría milenaria de la Iglesia Católica lo llevó a tan altas investiduras.

Este venezolano, de figura frágil, habla con la energía que le infunde su convicción democrática, su amor por la Patria, su desprendimiento de toda apetencia de poder o de figuración política. Por eso puede hablar con la mansedumbre de los verdaderamente fuertes. Por eso su verbo fustiga con fuerza. Y entre otras, esas son las razones por las cuales recibe de la contraparte los insultos más denigrantes. Pero también es porque se percibe a través de sus llamados, la persistente presencia de la iglesia para desenmascarar esta autocracia que paso a paso va camino de la dictadura totalitaria. Y no es para menos la desesperación del autócrata que agrede al Prelado. No son pocos los casos de fechas no muy lejanas, en los cuales esa iglesia ha salido en respaldo de su rebaño. En apoyo a pueblos que como el nuestro, no han deseado otra cosa que vivir en paz. En un ambiente de pluralidad donde se respeten las leyes, la dignidad de la persona y los derechos humanos más elementales.

Por otra parte, vemos con indignación y con tristeza al mismo tiempo, como algunos de los “políticos” saltan a la palestra a descalificar sibilinamente, sin mencionarlo, las arengas del Excelentísimo Cardenal Castillo Lara. Es esa estirpe de cortoplacistas cuya única preocupación, con algunas honorables excepciones, es el asalariado cubil de la Asamblea. Y junto a ellos, los sempiternos “allegados” o “seguidores” que les hacen la comparsa con la esperanza de usufructuar de las posibles “regalías” con las que estos vendedores de ilusiones han alimentado a las masas durante tanto tiempo. Por ello saltan de inmediato para salirle al paso a una voz de tanto peso específico como la del Cardenal. Lo que no logran entender es que esa voz es el grito de la inmensa mayoría de esta nación que Su Excelencia percibe con su sensibilidad de Pastor. Que llegó la hora de tomar la bandera de la dignidad que esa mayoría le pide con su silencio ensordecedor, para rescatar la libertad, la democracia, nuestra tradición pluralista y todos los otros valores que se están desmigajando en esta hora aciaga de la Patria. No, no pueden entenderlo, como tampoco entendieron nunca que llevaban a nuestro país directamente al barranco por el cual está rodando. Nunca entendieron o nunca quisieron entender porqué las Instituciones se desdibujaban en la mente de ese pueblo, al que atropellaban con su desdén y con su subestimación. Y ahora, cuando surge la voz de la dignidad de ese mismo pueblo, representado en su Cardenal, se atreven aún a disparar por mampuesto para tratar de quitarle fuerza al mensaje. Y no sólo los de la vieja estirpe, son también los que pretenden llamarse de nuevas generaciones. Que lástima que éstos tampoco han entendido nada.

Pero no todo está perdido.!!! Siga adelante Su Excelencia. Usted será de ahora en adelante la guía de este pueblo generoso. Usted tiene la fuerza de la razón y su Mensaje de dignidad se escucha en toda la geografía venezolana. Acepte la sugerencia que le lanzaron en estos días. Convoque a su pueblo, no sólo en Caracas, sino en todo el territorio a una oración, una liturgia, no para que sirva de plataforma a algunos que ya se están acercando a ver que obtienen bajo su inmensa sombra, sino para orar por la paz de este rebaño, para pedir el regreso de la libertad, de la vida democrática. Esa convocatoria, Su Excelencia, será una avasallante demostración de la vocación de libertad que esta nación ha tenido siempre. ¡ Adelante Su Excelencia, no desmaye!!! Vale la circunstancia para recordar al Señor de la Mancha: “….mientras los perros ladren es señal de que estamos avanzando…” ¡!Sursum Cordae!!.

(*): Contralmirante

Fundado hace 28 años, Analitica.com es el primer medio digital creado en Venezuela. Tu aporte voluntario es fundamental para que continuemos creciendo e informando. ¡Contamos contigo!
Contribuir

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Te puede interesar
Cerrar
Botón volver arriba