Al Alto Mando Militar
Estimados generales y almirantes miembros del Alto Mando de la Fuerza Armada Nacional me dirijo ustedes por esta vía, como ciudadano de esta bolivariana república, por cuanto tengo una serie de cuestiones que tienen que ver con ese importantísimo sector de la vida nacional que me inquietan sobremanera ya que no le consigo respuestas racionales y antes de emitir juicio alguno y por respeto a ustedes, quiero planteárselas para ver si logro una luz que me permitan aclarar tan confusa situación.
Leyendo la Constitución Nacional, la aprobada en diciembre de 1999 en pleno deslave vargüense, en el capítulo correspondiente a la FFAA, el artículo 328 reza que: “La Fuerza Armada Nacional constituye una institución esencialmente profesional, sin militancia política…”, entendiendo que toda disposición constitucional es de obligatorio cumplimiento para todos los ciudadanos, sin excepción, les pregunto ¿no constituye una violación a ese postulado el que oficiales activos, uniformados, asistan a actos públicos de proselitismo político partidista del partido de gobierno, en algunos casos hasta intervenir y en la mayoría aplaudir hasta rabiar? Mas adelante señala el mismo artículo que: “En el cumplimiento de sus funciones, está al servicio exclusivo de la Nación y en ningún caso al de persona o parcialidad política alguna”, en este caso ¿Puede un oficial activo, en acto o declaraciones públicas, brindarle su apoyo a la “revolución”, al “proceso”, denigrar de la oposición y expresar su compromiso, patria o muerte, con el ciudadano que ejerce la primera magistratura? Mas aun, cuando en el artículo 330 (ejusdem) se lee que: “Los o las integrantes de la Fuerza Armada Nacional en situación de actividad tienen derecho al sufragio…..sin que les esté permitido optar a cargo de participación popular ….ni participar en actos de propaganda, militancia o proselitismo político”. Cuando vemos una cantidad bien importante de militares activos en cargos públicos de carácter político ¿se estará violando alguna norma constitucional, de la propia ley de la FFAA o la esencia misma de la institución?
Se comenta que militares extranjeros, cubanos para mayor seña, están activos dentro de las instalaciones militares, con funciones de mando e inteligencia, si ello es cierto ¿se estaría violentando alguna disposición legal, reglamentaria o normativa de la FAN?. Cuando el jefe del Estado en su condición de comandante en jefe de la FFAA acude a instalaciones militares a dar arengas políticas y revolucionarias a favor de su proyecto político ¿será que este ciudadano está violando alguna disposición constitucional y en consecuencia cometiendo falta? Y, si ello es así, ¿no tendrían la obligación ustedes, como integrantes del Alto Mando, de hacérselo saber? Puede un ciudadano, por el hecho de haber sido electo presidente de la República y en consecuencia Comandante en Jefe de la FAN, ¿hacer, deshacer, ordenar, quitar, ascender, retardar en fin, lo que se le ocurra dentro de una institución tan sólida como la FFAA que se rige por principios casi universales y de gran tradición? ¿Puede, por instrucciones superiores, un oficial de menor rango mandar y dar órdenes a un oficial más antiguo?
Si el Preámbulo de la Constitución establece que somos una sociedad democrática y de libertad, ¿es aceptable que cada día se estrechen mas las relaciones militares con países que de acuerdo a la ortodoxia de la democracia occidental están lejos de serlo y mas bien son catalogados como dictaduras, no importa el signo y las bondades de sus gobiernos? Si en ese mismo Preámbulo se mencionan principios relativos al respeto a los derechos humanos, a la no intervención, a la democratización, el desarme nuclear, la paz, ¿creen ustedes que es constitucionalmente aceptable que el ciudadano que ejerce la primera magistratura esté, según dicen, permanentemente incitando a la guerra, a la exportación de su proyecto, al exterminio de sus adversarios políticos, que según él son sus enemigos y enemigos de la patria, insultando a otros jefes de Estado, creando una especie de ejército irregular o paralelo, respaldando programas de desarrollo de armas nucleares, apoyando grupos irregulares de otros países y propiciando una carrera armamentista?
Todas estas interrogantes y muchas otras que sería largo de enumerar, que por cierto a mi no me constan, pero que se comentan abiertamente en medios de comunicación nacionales y extranjeros y en la mayoría de los sectores de la vida nacional, ¿no creen ustedes que sería bueno que se aclararan, para salud del clima político del país y tranquilidad de todos los que habitamos en nuestra patria y que deseamos lo mejor para la misma, indiferentemente que seamos revolucionarios o no y que estemos o no de acuerdo con el llamado proceso del teniente coronel? Les planteo estas interrogantes, sin ingenuidad alguna, ya que al menos por ahora no los he oído gritar el ¡Uh, ah, Chávez no se va! como si lo han coreado los miembros de otros poderes e instituciones públicos, en el entendido que si por obediencia debida no pueden contestarme en forma pública me hagan llegar algunos comentarios en forma privada a mi dirección de correos. Les adelanto, por si acaso, que hay muchas formas de enviar correos sin que los pillen los servicios de inteligencia, por muy “gedós” que sean.
