Chávez es derrotable pero no está derrotado
Tal como lo diría Jürgen Habermas, estudioso de la comunicación social y del efecto que está tiene en la humanidad: “La acción estratégica de la comunicación aunque también se orienta al éxito, la acción estratégica no se mide por la consecución directa de un fin, sino por la influencia que se logra sobre las decisiones de un oponente”. Esto esta íntimamente relacionado a lo planteado por Sun Tzu (referencia obligada para cualquier estratega militar o político del planeta): “El engaño es un arma muy efectiva. Se debe generar una cortina de engaño constante, para que el enemigo nunca sepa lo que realmente está sucediendo. De esta manera cualquier acción será sorpresiva para el enemigo, consiguiendo así una ventaja para nuestro ejército”
De igual manera Jean-Marie Domenach concluyó: “Hitler y Goebels transformaron la propaganda moderna. Hitler logró sobreexcitar en lo más profundo de la masa, el odio y el ansia de poder. La propaganda dejó de estar ligada a un aspecto de la táctica para convertirse en una táctica en sí. Independientemente de cualquier ideología, en la propaganda política ya no se trata de razonar sino, antes que nada, de convencer para vencer”
Al comparar estas conclusiones con la realidad venezolana, podemos entender como es qué a pesar que los medios de comunicación que están del lado la oposición cuentan con mas expansión e influencia que los del oficialismo; Chávez logra su objetivo estratégico al colocar el debate en asuntos que no representan sus verdaderas debilidades; logra reforzar la perversa imagen de redentor de los mas pobres, cuando en sus 11 años de gobierno ha logrado profundizar las medidas económicas neoliberales adelantadas por los Carlos Andrés Pérez y Rafael Caldera. Además de generar dudas en un importante sector de la población, cuando logra manejar la percepción que su salida del poder representa el regreso de las cúpulas del pasado. Permitiéndole mantener el 48% de los votos validos y el aumento de los NINI, como expresión de la falta de un referente político donde se vean representados… Tal como diaria Joseph Napolitan: “La percepción en materia de decisión para el voto es más importante que la realidad”.
La falta de una correcta caracterización de Hugo Chávez y de las razones que le han permitido contar con un importante apoyo popular, han originado muchos desaciertos y falta de efectividad o contundencia en las acciones de quienes lo adversan. CHÁVEZ ES DERROTABLE PERO NO ESTA DERROTADO, pero si un sector de la oposición sigue empeñado en centrar su ataque contra el comunismo; vendiendo el pasado como lo mejor que ha tenido este país o atacando a Chávez y alabando al neoliberalismo; la cosa se pone difícil por la falta de debate y compromiso con los cambios sustanciales y radicales que desde hace tiempo viene esperando el pueblo.
Necesitamos líderes como José Bodas y Orlando Chirinos encabezando las luchas de los trabajadores venezolanos, dirigentes como Rafael Venegas diseñando y administrando la estrategia, aguerridos parlamentarios como Andrés Velásquez y Américo de Gracia encabezando denuncias e interpelaciones, al gobernador Henry Falcón coordinando las acciones de los mandatarios regionales y municipales… En otras palabras, necesitamos el fortalecimiento de UNA CORRIENTE PROGRESISTA en el seno de la oposición que sea capaz de atraer a los ciudadanos descontentos y desilusionados; contando con una plataforma de lucha para canalizar la protesta del pueblo; a la vez de encabezar en el 2011 el debate en cada uno de los rincones de la nación, sobre EL PAÍS QUE QUEREMOS, de manera que el candidato presidencial en el 2012 tenga compromiso con los cambios que exigen los venezolanos.
