El complot gringo
Con cierta frecuencia y ahora con más volumen Maduro y los suyos insisten en denunciar un complot que se está fraguando desde los Estados Unidos en contra de Venezuela con el fin de desestabilizar al gobierno actual y cambiarlo por otro arrodillado a los intereses imperiales.
Como nuestras ideas sobre lo que significa “complot” eran difusas nos apoyamos en el diccionario RAE y esto encontramos: (viene del francés complot) “Conjuración o conspiración de carácter político o social”.
Al ver “conjuración” resulta es lo mismo que conspiración y al ir a “conspiración” tiene dos posibilidades “unirse contra un particular para hacerle daño” (lo cual no sería el caso) y la de “unirse contra un superior o soberano”.
Sorpresas te da la vida. Resulta que complot quiere decir que los gringos se están “uniendo contra nosotros que somos sus soberanos o superiores”. Pero bueno, aparte de la travesura lingüística, se entiende que lo que se quiere decir es que los bichos del norte preparan algo horrible contra nosotros.
En realidad nos parece muy bien que se use el complot generalizado pues esto ahorra muchas palabras. Ejemplos.
Corpoelec perdió un bojote de horas y días hablando del mega apagón sugiriendo que una malla (?) se había encontrado cerca de la falla lo que hace suponer fue un sabotaje.
De la misma forma el de PDVSA empleó muchísimo tiempo en prepararse para dar una charla donde demostraba, sin sombra de duda, que el enorme incendio de Amuay que mató a decenas de ciudadanos fue causado por un acto de sabotaje que aflojó los tornillos de un equipo y es imposible que a alguien de la refinería se le olvidase apretarlos ya que todos los trabajos se realizan según estrictas normas de seguridad y han convertido a PDVSA en una de las empresas de menores accidentes a nivel mundial.
Lo mismo aplica a las larguísimas pérdidas de tiempo para explicar la falta de productos, la inflación, el dólar paralelo, la inseguridad, los hospitales majunches y miles de otros detallitos.
Con el uso del concepto de complot nos habríamos ahorrado mucho tiempo y trabajo y las explicaciones habrían sido sencillas. Si Miss Venezuela no gana es parte del complot para crear un ambiente de tristeza y frustración en nuestro País. Si Miss Venezuela gana se trata de una manipulación yanqui para distraernos, hacer parecer que todo anda bien y lubricar la invasión.
Si se vuelve a ir la luz es parte del complot. Si los pañales no se consiguen se trata de un bestial atentado, producto del complot, para reducir nuestro espíritu de lucha anti imperial.
La verdad es que al que se le ocurrió este latiguillo de defensa hay que condecorarlo.
Por cierto ya que los escribidores que criticamos al gobierno pronto pasaremos a ser tarifados del complot, agradeceríamos que los rojos le hablaran con seriedad a los invasores porque no nos han pagado un carajo y ya la pensión del seguro no alcanza.
