El debate necesario
La enfermedad del paciente en Cuba, la sapeadera del ex magistrado a sus compinches en las fechorías cometidas, contra las instituciones del Estado y los temas referidos al mismo proceso electoral, son asuntos que de hecho es cuesta arriba evitarlos, pero ¡ojo! los que tienen que ver con la cotidianidad de millones de venezolanos y que al despuntar el sol son su caballito de batalla, sobre ellos hay que insistir también, ya que los mismos no desaparecerán, ni porque mejore el enfermo o porque otro narco – corrupto sea atrapado con los dólares en la mano.
Ejes temáticos como la violencia, la impunidad y la seguridad ciudadana, son elementos que angustian hoy a toda la población, más de 150 mil venezolanos asesinados en nuestras calles, en lo que va de gestión chavista, indican la gravedad que reviste este flagelo de la inseguridad. De allí la necesidad de promover e insistir en la discusión de este asunto tan desgarrador en el seno de nuestras familias, que cuando menos lo esperan es afectada por esta estadística mortal. Ahora bien, si necesario es promover las deliberaciones, más importante aun es buscar iniciativas y propuestas que contribuyan a disminuir estos alarmantes partes de guerra contra la ciudadanía.
También debe ser propósito de quienes aspiramos un cambio de rumbo en el país, colocar en el debate los aspectos referidos a la inclusión, la pobreza y la productividad; dado que los mismos han sido incorporados como objetivos del milenio por la ONU y sin embargo a pesar de las iniciativas tomadas por el gobierno, con las ya conocidas misiones, el balance que arrojan estos esfuerzos, no han logrado disminuir en los términos requeridos, los niveles de pobreza en el país. Además para nadie es un secreto que la política de expropiación impuesta, ha llevado a la ruina a sectores productivos manufactureros y agrícolas; hecho este que ha obligado al gobierno a tener que sustituirlos por una economía de puerto jamás vista en los últimos 50 años.
Si en esta década de gestión, alguna política gubernamental ha afectado a los Estados, Municipios y al mismisimo poder comunitario, que dicen defender, ha sido la manía centralista y hegemónica impuesta por la primera autoridad del país. Esto hace imprescindible el que nosotros debamos confrontarlos y hacer que temas sobre el estatismo, la descentralización y la autonomía, sean parte de lo que se discuta y con mayor énfasis, en esta región zuliana que ha sido testigo de cómo las políticas centralistas, le arrebataron de un solo tirón la administración y control de la vialidad inter urbana, del Puente, Puerto y aeropuerto.
En definitiva y aunque falte tiempo para el arranque oficial de la campaña electoral, desde ya y en cada uno de los frentes dispuestos para esta batalla, debemos impulsar también estos temas, de manera que quede bien claro las salidas y alternativas que están en juego en los días por venir. El País lleva años inmersos en una diatriba política, que muchas veces ha colocado a sus ciudadanos al borde de una confrontación definitiva, incluso por vía de la violencia armada. Se avecina un nuevo punto de inflexion y dos modelos de país se expondrán con sus proyectos y enfoques. Asumamos nosotros el debate necesario, porque el mismo nos conducirá a la victoria del 7 de octubre.