El Fiscal se volvió loco
“Por mucha poder y riquezas que el hombre posea y por grandes que sean la salud y las comodidades que disfrute, no se siente satisfecho si no cuenta con la estimación de los demás”
Blaise Pascal
¡Increíble pero cierto! Ayer chantajeó al Gobierno
con renunciar si no aceptan su verdad
FISCAL GENERAL DE LA REPUBLICA, ISAÍAS RODRÍGUEZ, SE VOLVIÓ LOCO
*** Su salida del cargo está planteada hace un mes, es decir, desde el momento cuando el Presidente Chávez decidió botarle de la Procuraduría a su socia Marisol Plaza Irigoyen. ¡Que se vaya!, grita el país, incluyendo al chavismo de a pié.
*** Este es el funcionario que más daño le ha causado a la imagen de su gobierno “revolucionario”, cosa que el Presidente Hugo Chávez no debe agradecerle para nada.
*** Ayer, en un arranque de cólera, anunció que castigará al director del CICPC, Marcos Chávez, a quién acusó de confundir el país
El relajo y la irresponsabilidad de Isaías Rodríguez tienen asombrado al país. Sus últimas declaraciones emitidas ayer demuestran que el Fiscal General de la República Bolivariana de Venezuela requiere urgentemente de ser atendido por un psiquiatra. Él no está bien de la cabeza y esa es la causa de hacer lo que ha venido haciendo. ¡Perdónalo Dios mío, que no sabe lo que dice!
Ayer, en otro de sus arrebatos de locura, el fiscal Julián Isaías Rodríguez Díaz, no solo reiteró sus asquerosas declaraciones del martes, ofrecidas en rueda de prensa, y en las que justificó el asesinato del padre Jorge Piñango, al acusarlo de haber realizado acciones que lo llevaron a su muerte. «Él (refiriéndose al prelado asesinado) realizó actos que lo llevaron a esa muerte y lo estoy diciendo como fiscal general. Tengo los pelos en la mano, tengo las declaraciones», dijo al país Isaías Rodríguez. Ayer dijo que esas declaraciones que dio el martes pasado son ciertas y rechazó las críticas que le hizo la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) por violar la reserva legal del caso, a la vez que destacó que sobre la muerte del Padre Piñango hay mucho más, y amenazó incluso con sacar a la luz publica el resultado del trabajo que realizaron los patólogos en el cadáver del prelado. En ese punto se mostró interesado en que se publiquen los resultados de la autopsia y las declaraciones de los testigos, cuando las investigaciones lo permitan, para que «el país vea realmente qué fue lo que ocurrió allí. En esa autopsia van a ver exactamente lo que ellos están desmintiendo o pretenden desmentir en este momento; y no de ahora, de antes. Esa autopsia habla de hoy y de antes, y habla claramente», enfatizó el Fiscal.
Para suministrar estas inverosímiles declaraciones, el fiscal Isaías Rodríguez hizo una llamada al programa “En Confianza” de Venezolana de Televisión, interrumpiendo una entrevista que le hacía en ese momento Ernesto Villegas al ministro de Interior y Justicia, Jesse Chacón. En las palabras del fiscal se evidenciaba la cólera que lo agobiaba y que lo llevó a arremeter salvajemente contra el jefe del CICPC. “No creo en Marcos Chávez” dijo lleno de rabia. “Buscaré funcionarios policiales que me merezcan confianza, porque no creo en Marcos Chávez, director del Cuerpo de Investigaciones, Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC). Las declaraciones de Marcos Chávez fueron irresponsables. No puede hablar de móvil de robo, cuando no hubo móvil de robo (…) No se puede plantear y adelantar una hipótesis en una investigación que no ha concluido, y mucho menos él, porque la dirección de la investigación la lleva el Ministerio Público. Esa declaración de Marcos Chávez ha confundido al país, ha manipulado la investigación y ha sido utilizada por una planta para pervertir lo hechos», precisó Julián Isaías Rodríguez Díaz, quién además amenazó al jefe policial cuando dijo: “… desde el Código Orgánico Procesal Penal y desde la Ley de Policías solicitaré las investigaciones correspondientes para que se impongan las sanciones a que haya lugar». Estas coléricas palabras del Fiscal General, cuestionando públicamente al director del CICPC, en nada contribuyen con la paz y el sosiego que el país requiere. Con este nuevo escándalo, Isaías Rodríguez lo que hace es fomentar más el miedo y la incertidumbre entre los venezolanos y es donde fundamentamos nuestra tesis de que lamentablemente Julián Isaías Rodríguez Díaz está demente y que requiere de atención psiquiatrica inmediata.
Crónica de una renuncia anunciada
Durante su intervención telefónica, el titular del Ministerio Público procedió a chantajear al Gobierno Nacional, diciendo que si no aceptan su verdad, renunciará. «Si se hacen concesiones contra la (mi) verdad por parte del Gobierno, del Ministro, de la policía y del Vicepresidente» pondré el cargo a la orden de la Asamblea Nacional (AN). Insistió en que «no hay poder humano, ni divino contra la verdad y que ésta debe y tiene que prevalecer, sobre todo en una sociedad que aspira a cambios auténticos en la Justicia».
Sobre esa anunciada renuncia queremos señalar que en medio de su locura, Isaías Rodríguez ha encontrado una excusa para abandonar el cargo, pues el país entero sabe que su salida de la Fiscalía General está planteada hace un mes, es decir, desde el momento cuando el Presidente Chávez decidió botarle de la Procuraduría a su socia Marisol Plaza Irigoyen. Con su nuevo espectáculo de ayer, el Fiscal lo que hizo darle veracidad a la crónica ya publicada, de su anunciada renuncia. ¡Que se vaya! –grita el país, incluyendo al chavismo de a pié-
Sin lugar a dudas podemos afirmar que el funcionario que más daño le ha causado a la imagen del gobierno “revolucionario” es el fiscal Isaías Rodríguez, cosa que seguramente el presidente Hugo Chávez no le agradece para nada, sobre todo en este tiempo de elecciones. Desde esa posición ha empastelado todos los casos importantes, comenzando con el de Danilo Andersón, pasando por el de los hermanos Faddoul, Miguel Rivas, Filippo Sindoni y Jorge Aguirre, para terminar en este, del asesinato del padre Jorge Piñango.
FOTOs LEYENDA
1) Isaías Rodríguez se volvió loco y requiere urgentemente de atención psiquiatrica. Chávez no le agradece el daño que le ha causado a la imagen de su gobierno
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2) El Padre Jorge Piñango. Después de muerto, Isaías Rodríguez se ha empeñado en desprestigiarlo, para cobrarle a la Iglesia su digna posición frente al régimen
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