El manifiesto que toda Venezuela esperaba
Un país que clamaba por defender las libertades, la democracia, y los derechos humanos, se encontró con un liderazgo blandengue, que solo le ofrecía participar en elecciones, precedidas de bailoterápias, jingles, y discursos sin contenido; cuando lo que se necesitaba era deslegitimar al régimen totalitario, no avalando ninguna de sus acciones, y denunciando su vergonzosa subordinación a Cuba.
Pero luego de la firma del “Pacto de La Habana” y el posterior golpe a la Constitución, perpetrado por los herederos políticos de Chávez, hay un sentimiento generalizado de indignación que surge desde todos los rincones de la Patria.
Un grupo muy valioso de compatriotas supo recoger ese clamor nacional, a través de un manifiesto que comenzó a circular el pasado 10 de enero, el mismo día que se llevó a cabo aquella triste y horripilante juramentación.
Se trata de una proclama dirigida a todos los sectores democráticos del país y en especial a las Fuerzas Armadas Nacionales, titulada “!Hagamos cumplir la Constitución e impidamos la dominación cubana!”.
El documento plantea cómo, promovido y amparado por el alto gobierno, los cubanos han tomado el control sobre nuestras instituciones y actividades, entre ellas, “las notarías, los registros, el sistema de identificación y extranjería, la política exterior y sectores importantes de la economía nacional”. Además, han pasado a dominar “a los cuerpos policiales y a las fuerzas armadas, en detrimento de la seguridad y defensa del estado”.
El manifiesto explica con detalle las consecuencias de someter al país a la dominación cubana, y denuncia que, “preocupados por la desaparición física del presidente Chávez, el régimen cubano ha diseñado un mecanismo para perpetuar su control sobre Venezuela”.
Interpretando el sentimiento de la mayoría de los venezolanos, hacen un llamado a todos los sectores del país, en especial a las Fuerzas Armadas Nacionales, para que como sociedad pongamos fin a la dominación cubana y restablezcamos el imperio de la constitución.
Finalmente, el documento propone conformar una gran alianza nacional, apoyada por las Fuerzas Armadas, para restablecer la vigencia de la Constitución, tal como lo ordena el Artículo 333 de la misma; y luchar sin descanso hasta lograr la liberación de Venezuela, frente a la tutela de los cubanos.
Este planteamiento debe convertirse en la principal línea de acción de la dirigencia opositora; porque, como dice el propio documento, durante las próximas semanas se decidirá si dejaremos de existir como nación, para convertirnos en un satélite de Cuba, “o si recuperaremos nuestra identidad y nuestro destino histórico”.
La lista de signatarios del manifiesto, que ya lleva 2.000 firmas y sigue creciendo, está encabezada por Enrique Aristeguieta Gramcko, quien perteneció a la Junta Patriótica que derrocó a Pérez Jimenez; e incluye a María Corina Machado, Diego Arria, Pablo Medina, Oswaldo Álvarez Paz, Marcel Granier, Asdrúbal Aguiar, Emeterio Gómez, Oscar García Mendoza, Aníbal Romero, Rafael Alfonzo, Macky Arenas, Nitu Pérez Osuna, Alfredo Coronil Hartmann, Alfredo Weil, y un nutrido grupo de militares retirados, entre ellos a Fernando Ochoa Antich, Carlos Julio Peñaloza, José Antonio Olavarría, y Rafael Huizi Clavier.
@LuisSemprumH
