El mejor oficio del mundo
El 7 de octubre de 1996, Gabriel García Márquez, ante la Sociedad Interamericana de Prensa –SIP-, en Los Angeles, pronunció unas palabras acerca del periodismo, que después tituló: El mejor Oficio del mundo. ( Nótese que estoy investigando y al mismo tiempo estoy copiando descaradamente el título de ese trabajo)
Decía allí García Márquez que: Toda la formación de un periodista debe estar sustentada en tres pilares maestros:
1.- La prioridad de las aptitudes y las vocaciones.
( No hay comentarios. Si no hay aptitud ni vocación, el periodismo es una carga )
2.- La certidumbre de que la investigación no es una especialidad del oficio sino que todo el periodismo debe ser investigativo por definición.
( Recuerden que, hace unos meses en Valencia, Estado Carabobo, Venevisión realizó un acto en la maestranza César Girón, para celebrar la V de oro, donde murieron 11 personas –ocho niños- – y los medios cercaron la posibilidad de ir más allá en esa investigación ).
3.- La conciencia de que la ética no es una condición ocasional, sino que debe acompañar siempre al periodismo como el zumbido al moscardón.
( Vuelvo a citar el caso anterior. Y hay más: la manera como ahora el periodista quiere dar tubazos a punta de chismes sin importarle a quién perjudica, sin importarle incluso su propia credibilidad. ¿Será cierto que el periodista tiene un código de ética?)
Sigue diciendo García Márquez acerca del periodismo que: “ el empleo desaforado de comillas en declaraciones falsas o ciertas permite equívocos inocentes o deliberados, manipulaciones malignas y tergiversaciones venenosas que le dan a la noticia la magnitud de un arma mortal. Las citas de fuentes que merecen entero crédito, de personas generalmente bien informadas o de altos funcionarios que pidieron no revelar su nombre, o de observadores que todo lo saben y que nadie ve, amparan toda clase de agravios impunes. Pero el culpable se atrinchera en su derecho de no revelar la fuente, sin preguntarse si él mismo no es un instrumento fácil de esa fuente que le trasmitió la información como quiso y arreglada como más le convino”.
También nos dice que “la mejor noticia no es siempre la que se da primero sino muchas veces la que se da mejor”.
Cito a García Márquez porque quiero apoyarme en él para decir lo que quiero decir. A veces, cuando discuto con mis alumnos en la UCV, les pregunto si en estos momentos habrá periodismo en Venezuela?. Lo hago para provocarlos. Porque parece que hay otra cosa. Hay dos puntos de vista y el periodista asume, a veces, descaradamente el punto de vista del medio en el que trabaja.
Y hay, además, un deseo enorme de estar por encima del entrevistado. De ser la noticia. De habló para ustedes, Roberto Malaver, La Noticia. Ese deseo de figurar a como de lugar. De que sepan en la casa que la noticia la estoy dando yo, y el periodismo soy yo, y el medio soy yo.
¿Estaremos los periodistas cumpliendo con lo que dice el maestro? Alquilo el libro El País como oficio.
