El pacto López-Radosky
No se trata de un acto de humildad la renuncia de López y su alianza con Randosky, sino una estrategia política para asegurarse al menos una curul, una gobernación o una alcaldía en el futuro próximo.
Esto tiene lógica cuando de alcanzar el poder se trata, pero no cuando de sacar del poder al que tanto daño le ha causado al país que es lo que se ventila. Esa salida intespectiva, en lugar de sumar le resta imagen a López e incluso votos a Randosky, pero sobre todo, le resta puntos a la Unidad ante la opinión publica.
Si no conociéramos el carácter democrático y la brillante trayectoria de estos dos servidores públicos, diríamos que su pacto obedece al mismo espíritu sectario del presidente de la republica y de su ministro de la defensa, quienes con sus descalificaciones insisten y persisten en cerrarles el paso a los adecos del presente representados por Pablo Pérez quien será el virtual ganador de la contienda electoral del próximo 12 de febrero y de la del 7 de Octubre.
Chávez no le teme a la justicia de los calderitas ni a la de los chiriperos herederos de aquellas políticas erradas, las cuales le cerraron el paso no solo a los lideres emergentes de COPEI, sino que también justificaron el golpe fallido contra el presidente CAP y beneficiaron con el sobreseimiento de la causa al hoy golpista presidente quien para el 98 estaba inhabilitado constitucionalmente para cualquier cargo de elección popular por haberse alzado en armas contra la democracia y pisoteado el uniforme militar.
Para derrotar a Chávez en Octubre y obtener el apoyo nacional e internacional para sanear al país y devolverle su dignidad, no solo hay que tener la cara bonita y un buen programa social trazado en un papel, sino tener pueblo, un discurso, un vozarrón y hasta un nombre popular.
Es mas, hay que tener hasta estatura corporal para montarlo en el cuadrilátero si se diera el caso, ya que a los cobardes como Chávez hay que confrontarlos con un púgil que le desbarate el show en el que se escuda junto a sus gorilas desde donde a diario le escupe la cara a sus subalternos y a los empleados del circo.
Conociendo la firmeza de la fémina María Corina, no es probable que renuncie a favor de alguien; aunque, déjeme decirles que “por ahora” no le caería mal la vicepresidenta de la republica si se arrima a la candela, ya que quien de veras puede meter a Chávez y a una docena de sus cómplices en la cárcel por sus crímenes de lesa patria y lesa humanidad, es la corriente representada por Pablo Pérez. Tengamos paciencia y esperemos la reacción de MCM en la recta final.
