El sexo de los querubines
Un arquitecto no muy bien informado me aseguró que salvo “tres tristes tigres” (Manuel Caballero, Elías Pino Iturrieta y yo) todos los intelectuales de Venezuela están con el teniente coronel Hugo Chávez. Como “prueba” me habló de un manifiesto en el que más de trescientos escritores lo apoyaron poco antes de las elecciones de diciembre. Le respondí que de esos trescientos y tantos apoyadores de oficio apenas unos quince son en verdad escritores, y todos ellos con mucho que agradecer al sistema de autobombo y repartición de premios que el monopolio fascistocomunista de la cultura venezolana impuso desde hace mucho años, y que su buen daño le ha hecho a la creación literaria de nuestro país. En Venezuela hay unos doscientos auténticos escritores. Que quince de ellos se identifiquen con el gobierno militar fascistocomunista no es ninguna proeza. Además de esos tres a que se refirió el arquitecto, sé por lo menos de diez o doce que públicamente han escrito artículos en los que muestran su rechazo al gobierno personalista y antidemocrático del teniente coronel Chávez Frías. Entre ellos, por ejemplo, Alexis Márquez Rodríguez, Luis Beltrán Mago, José Tomás Angola. Asistí hace unos días a una reunión de escritores democráticos, y si bien es cierto que terminó en un debate sobre cuántos ángeles caben en la cabeza de un alfiler o sobre el sexo de los querubines, por lo menos me demostró que hay voluntad de dar un paso al frente y proclamar que los escritores, que por desgracia hace mucho tiempo perdieron su condición de Conciencia del país, no respaldan el gran paso atrás que significa el régimen autocrático y jurásico de Chávez Frías, un coronel que no puede tener quien le escriba.
