Opinión Nacional

Entrevista a Víctor Poleo

(%=Image(1247936,»R»)%)

Uno de los temas más actuales en Venezuela es el de las carencias del sistema eléctrico nacional. Víctor Poleo, ingeniero mecánico graduado en la UCV y ex director del sector eléctrico del Ministerio de Energía y Minas (99-01), asegura que la problemática eléctrica no va a resolverse mientras siga Hugo Chávez en el poder, pues él y los que gobiernan con él son el principal impedimento para las transformaciones que se requieren para mejorar en esa área.

—Considerando las circunstancias socio-políticas de nuestro país, ¿qué calificativos le merece la sociedad venezolana?

— Hay una categoría marxista denominada lumpen, y esa clasificación refiere a lo que Marx consideraba el mayor obstáculo para un cambio social: es la delincuencia, son personas sencillamente dañinas a la sociedad, irrecuperables. Si la pregunta es cómo tipificar a la sociedad venezolana, me atrevo a decir que es una sociedad lumpenisada en el contexto marxista. A manera de cuantificación, valga la siguiente referencia: en Inglaterra, cuando el lumpen alcanza 3 en 100, se da un alerta político, y eso se entiende como que el gobierno está confrontando serias amenazas a la estabilidad social y se toman acciones extremas, y no las voy a detallar, pero una de ellas es la deportación de personas no británicas venidas al Reino Unido, y ahí está la historia de la formación de Australia.

—¿Cuál es la causa de la crisis eléctrica?

—Sí, y es la falta de conocimiento, y la sociedad necesita saberlo todo sobre energía. Es irónico que Venezuela tenga un potencial energético magnífico con el río Caroní para la electricidad, y los crudos, el gas, el carbón, el uranio; y, sin embargo, la gente conozca tan poco sobre todo eso, sobre los paradigmas energéticos. Este es un viejo problema de la sociedad venezolana: vivir de renta petrolera sin entender como funciona.

Poleo, al ser interrogado por los efectos de la crisis eléctrica, mencionó que más allá de un malestar social general, puede significarle al país un revés económico muy puntual y grave. “El Caroní ha contribuido con la renta petrolera. Es un río espectacular, que produce abundantes cantidades de energía limpia y barata, y eso favorece a la renta, porque si no tuviésemos el Caroní y sus estructuras productivas y deseásemos tener la capacidad eléctrica instalada en la actualidad, tendríamos que quemar medio millón de barriles en la producción de esa energía, los cuales dejaríamos de exportar”, dijo el ingeniero. Denominó a eso como renta eléctrica y cree que Venezuela la está descuidando.

—¿Cuál es la causa del conflicto eléctrico?

—Definitivamente no es El Niño. Ese es un fenómeno del Pacífico que no tiene nada que ver con la Cuenca Amazónica. A la hora de hacerse la víctima, éste gobierno no tiene límite, y ahora usa El Niño como excusa. El problema en verdad es político, y ¿cuáles son las causas?, bueno, ésta crisis empezó tiempo atrás, en los años ochenta, cuando se decidió privatizar la industria eléctrica, y con esa decisión se dejó de invertir, pero luego, cuando asumió Chávez, ese proceso se detuvo, y sólo una empresa acabó en manos privadas, que es la de Nueva Esparta. En el 2007 el Gobierno decidió comprar hasta las tuercas y tornillos de todo el sistema eléctrico.

—¿Qué ha hecho el gobierno con el sistema eléctrico?

—Ha puesto dinero en ese sistema, pero éste ha sido robado o despilfarrado.

El ingeniero también lamentó la desprofesionalización de la industria eléctrica.”Seremos como Zimbabue o Cuba. Para manejar un sistema tan complejo, como lo es la electricidad en Venezuela, se necesita un conocimiento muy especial, muy técnico, y esa gente no lo tiene, y puedo nombrarlos: me refiero al señor Ramírez, al señor Alí Rodríguez, y a quien los dirige, que es Hugo Chávez. Con la electricidad no pueden jugar”, explicó, y también dijo que no se podían usar paradigmas ideológicos para manejar algo tan delicado.

—¿Cómo se debe tratar, entonces, la política eléctrica de Venezuela?

— No hay un concepto organizacional definitivo del sector eléctrico. La gran oferta del Caroní debe estar en manos del Estado, por múltiples razones: seguridad, capacidad de inversión, etc. También debe estar en manos del Estado el sistema de grandes líneas de transmisión a 400 mil y 800 mil voltios. Ahora, empresas como la Electricidad de Caracas, ¿por qué no pueden quedar en manos de los accionistas, que son los usuarios?, es más, en la Ley Eléctrica del año 1999 propusimos que la distribución eléctrica pasara a manos de los usuarios, valga decir, que se constituyera una empresa en manos de los usuarios y que dirigiesen la distribución, la llegada de la electricidad a la casa, al sector industrial, al comercio. Les sorprenderá saber que en Suecia hay 1500 empresas de distribución eléctrica y los vecinos se ocupan de que la electricidad llegue finalmente a los hogares, y facturan y mantienen óptimo el servicio. Ahí, las empresas de distribución están en manos de los usuarios.

Poleo es de la opinión que el Gobierno impulsa una sovietización del país, y que el mayor daño que ha hecho ha sido su ataque constante a la clase profesional, pues le ha quitado al país valiosos conocimientos que lo han dejado ciego de cara al futuro, por lo tanto, no tiene esperanzas de que el problema eléctrico encuentre solución bajo el gobierno de Chávez.

Fundado hace 28 años, Analitica.com es el primer medio digital creado en Venezuela. Tu aporte voluntario es fundamental para que continuemos creciendo e informando. ¡Contamos contigo!
Contribuir

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Te puede interesar
Cerrar
Botón volver arriba