Guerra sucia, desinformación y fraude electoral
Como candidato a la Asamblea Nacional (AN) por la lista del Movimiento Progresista (MOVPRO) del estado Trujillo, rechazo en forma categórica la campaña de desprestigio que vienen adelantando los factores políticos que conforman la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) del estado Trujillo en contra de nuestros candidatos.
Guerra sucia y desinformación. La MUD se ha dado a la tarea de desarrollar una campaña sucia, basada en la mentira y la desinformación, señalando al MOVPRO como una quinta columna del chavismo para debilitar la opción de la MUD en las elecciones del 26-S. Estos mismos personeros, sin tener prueba alguna, han divulgado que hemos recibido recursos financieros por parte del oficialismo para realizar nuestra campaña electoral.
En nombre de los candidatos del MOVPRO, Diva García por el circuito 1; Oscar Bastidas, por el circuito 2; Olga Simancas, del circuito 3 y en el mío propio, rechazamos esta vil y canalla campaña difamatoria desatada por la MUD cuyo objetivo es entorpecer la efectiva aceptación de nuestras candidaturas por parte de los miles de ciudadanos con quienes hemos hablado, cara a cara en sus casas, en las calles y caminos trujillanos, durante esta campaña electoral. Estos ciudadanos son la mejor prueba testimonial de nuestra austera, modesta, honesta y humilde campaña, porque nunca hemos hecho alarde de maquinarias y pompas festivas electoreras, propias del oficialismo y de la MUD, groseramente financiadas con dineros públicos o capitales privados. En cambio, en el MOVPRO no disponemos de dinero para pagar la mínima publicidad en prensa, radio y televisión.
Lo que si tenemos de sobra en el MOVPRO es un mensaje esperanzador contenido en nuestro Plan de Gestión Parlamentaria (PGP) en el cual explicamos la visión y misión a cumplir una vez logrado alguno de los cinco escaños de la AN por el estado Trujillo. Este compromiso está dirigido a tres metas principales: 1) legislar a favor del pueblo trujillano; 2) ejercer un efectivo control parlamentario de todos los poderes del Estado, principalmente el poder ejecutivo y 3) acompañar a las comunidades trujillanas en sus peticiones o reclamos que realicen ante las Alcaldías, Gobernación, Ministerios, Presidencia de la República o de cualquier ente gubernamental para lograr y/o mantener en buenas condiciones la prestación de los servicios públicos en función de una mejor calidad de vida social. De allí que el creciente posicionamiento de nuestras candidaturas se deba a ese mensaje el cual está resumido en el boletín informativo y en el volante-guía de cómo votar el 26-S por nosotros que han sido entregados durante esos contactos con los electores.
Nuestro discurso está dirigido a todos los trujillanos de buena voluntad quienes cada día rechazan el irrespeto del cual han sido objeto por parte de las cúpulas partidistas del oficialismo y de la MUD ya que sus candidatos han sido impuestos por esas cúpulas con el agravante de que los del oficialismo ni siquiera son nativos del estado Trujillo. Para nadie es un secreto que en Trujillo alrededor de un 55% de los electores, no tienen simpatías por esos candidatos porque éstos están más comprometidos con los intereses de esas cúpulas partidistas y no con las necesidades y aspiraciones de un pueblo que ha sido repetidamente engañado y ultrajado.
Fraude electoral en marcha. Existen tres indicios-prueba convergentes que ponen en evidencia un posible acuerdo, especie de trampa-fraude, entre el oficialismo y la MUD de espaldas al pueblo y en contra de los candidatos del MOVPRO. Una prueba es que dos de los candidatos de la MUD, específicamente los de las circunscripciones electorales 1 y 3, son militantes del PSUV. Este maridaje fue oportunamente denunciado a través de la prensa trujillana y hasta ahora no ha habido un desmentido o aclaratoria por parte de ambos sectores. En cambio, ninguno de los candidatos del MOVPRO puede ser señalado como militantes de los partidos del oficialismo.
Otra prueba contundente es que los partidos de la oposición, principalmente AD, COPEI, MAS, PJ, entre otros, acordaron con el chavismo abstenerse de participar en las elecciones parlamentarias de noviembre de 2005, facilitando con ello que el Presidente Chávez copara la totalidad del poder legislativo y desde allí controlar los demás poderes públicos. Las consecuencias de esta entrega y traición de los partidos opositores en contra de la voluntad del pueblo la sufrimos hoy más de treinta millones de venezolanos.
Por último, una nueva trampa-fraude podría estarse acordando en los próximos días entre el oficialismo y la MUD con el fin de torcer de nuevo la voluntad del pueblo venezolano, y en particular del trujillano. Los candidatos del MOVPRO no vacilaremos en denunciarla y develarla, una vez tengamos en nuestro poder las pruebas que está recabando un numeroso voluntariado de amigos y simpatizantes de nuestro movimiento. El chantaje, la manipulación, el engaño y el ultraje por parte de las “cúpulas podridas” del oficialismo y de la MUD no pasarán.
