La mesa unitaria y las elecciones
Los dirigentes y miembros de partidos políticos ven en las elecciones la vía constitucional, democrática y pacífica para regresar al imperio de la Constitución y recuperar así las instituciones democráticas y con ellas la justicia y la paz social. No somos tan optimistas para pensar que esta vía sea posible pero sí creemos que es la mejor.
Si los partidos son sinceros cuando ponen la salida de esta crisis en la vía electoral, entonces tienen que organizarse y exigir las condiciones que hagan posible una consulta al pueblo que, por transparente, sea también confiable para todos los venezolanos, opositores y gobierno. ¿Y como mostrar una voluntad decidida al respecto? Tiene que demandar del gobierno la Mesa Unitaria cinco cosas muy concretas.
La primera es que la nueva Ley Orgánica Electoral aprobada por una Asamblea Monocolor, sea sometida a un Referéndum consultivo para conocer si el pueblo también la aprueba pues él es el Soberano. Como el pueblo es ahora el que manda no debe haber dificultad en esto.
La segunda es que el árbitro electoral sea integrado por representantes de los diferentes partidos para que el ciudadano confíe en él con lo cual al interpretar la Mesa lo que el pueblo quiere hará que se multipliquen los afiliados y simpatizantes de los partidos que la integran.
La tercera que el Registro Electoral se haga de nuevo, o que sea depurado el actual pero con la participación de representantes de los partidos de manera que se genere en las sucesivas consultas una amplia participación ciudadana lo cual fortalece la democracia y se logra que esta sea realmente “participativa y protagónica”.
La cuarta es exigir que tanto los medios públicos como privados den cabida a la propaganda electoral en condiciones de tiempo y costo iguales a fin de evitar todo ventajismo para que se pueda conocer cual es la voluntad real del Soberano.
La quinta que la actuación de la FAN se limite a garantizar el orden interviniendo únicamente cuando el árbitro se lo solicite pues la consulta es un acto cívico.
Si las organizaciones políticas quieren recuperar credibilidad tienen que ANTICIPAR una campaña nacional que demuestre su fortaleza y exija estas cinco condiciones necesarias para la transparencia del acto electoral. Pero no pueden dejarla para cuando tengan encima la fecha de la primera consulta sino empezarla de inmediato. Si los actuales dirigentes piensan que esto es muy cuesta arriba que le cedan sus cargos entonces a la nueva generación y se jubilen porque no hay salida electoral sin garantía de consulta transparente. Tan simple como eso.
