La misión del avión de Chávez
Caracas (AIPE)- La opinión venezolana se ha conmovido al conocer que el comandante Hugo Chávez se compró un Airbus A319 Corporate Jetliner por más de 75 millones de dólares, algo así como 75 mil millones de bolívares. Venezuela es uno de los países de mayor miseria en el mundo actual y los venezolanos no nos explicamos por qué la “revolución bolivariana” no combate el hampa ni las enfermedades de los venezolanos, pero sí tiene suficiente dinero del petróleo para pagar a bandas armadas, a frentes populares en barriadas urbanas, para regalarle millones de dólares en petróleo a Fidel Castro y ahora para comprar un avión tan costoso para el uso exclusivo del Presidente de la República.
La respuesta fácil es que se trata del “nuevo-riquismo” de Chávez, quien adquiere un súper avión porque es dueño de un país donde puede hacer lo que le da la gana. “Es la vanidad del recién vestido”, comentan los adversarios del comandante. Pero se equivocan. Este regalo que Chávez se dio no es fruto de su complejo de caudillo, sino un artículo de primera necesidad en la guerra de Chávez contra el mundo libre.
El nuevo “juguete” es el vehículo fundamental para estrechar los contactos personales y estratégicos con movimientos políticos adversarios a Estados Unidos en Irak, Irán, Libia, con los círculos palestinos suicidas, los guerrilleros colombianos y también con otras organizaciones que operan en los puntos más remotos del planeta. Este avión es fundamental para los contactos personales y las misiones confidenciales, si partimos de la base que el centro estratégico del “proceso”, como ellos lo llaman, no es exclusivamente venezolano, ni latinoamericano, sino de carácter mundial.
Para saber lo que oculta el avión del presidente sólo es necesario recordar algunos puntos básicos que aparecen en el reciente informe confidencial sobre la revolución bolivariana. Ese documento dice textualmente: “Se consolidan espacios de colaboración táctica y estratégica con las FARC y el ELN, que solamente esperan la caída de Hugo Chávez para legitimar su actuación en Venezuela (revolución bolivariana)… Se desarrollan las relaciones congeladas por varios años del proceso con países y movimientos árabes que se oponen a Estados Unidos… Se intentan establecer relaciones ‘estratégicas’ con Rusia y China para reemplazar tecnología, información y asesoramiento en distintas áreas de la producción nacional (bélica y no bélica), mientras se desarrollan los ‘convenios’ con Irán y Cuba… Se facilita la resurrección de la izquierda latinoamericana por financiamiento de la partida secreta. Se ayuda de distintas maneras a la revolución cubana…”
Después de conocer estos cuatro puntos de los diez que contiene el informe confidencial, no se necesita ser adivino para saber cuáles son los objetivos secretos del costoso avión. Lo que ocurre es que se insiste en subestimar a Chávez y en negarse a ver su peligrosa estrategia, que convierte a un oscuro paracaidista, campesino del llano venezolano, en verdadera amenaza mundial. El punto nueve del informe señala lo siguiente: “desde el 4-F (fecha del golpe militar de Chávez contra Carlos Andrés Pérez) está planteada la conformación del Tercer Estado (tierra liberada de Venezuela y Colombia). Pero las FARC sostienen hoy que es necesario ingresar a una guerra insurgente total con normas de influencia no formales, antes que plantearse la creación de un Estado que sería barrido por Estados Unidos”. Más adelante dice el documento confidencial que “el proceso -chavista- está llegando a su tercera etapa (la primera fue la “toma del gobierno; la segunda fue la “etapa de transición”, la tercera es el “desencadenamiento histórico”, “Gran Ruptura Histórica” o Revolución Bolivariana)”. Al costoso avión de Chávez le sobrarán “relaciones institucionales” que cumplir.
* Analista político venezolano.
