Opinión Nacional

La Nota del Padre Francisco

Recibo una nota del padre Francisco, con quien trabaje hace mucho tiempo en Fe y Alegría en un programa de radio de corte cultural. La resumo: “He visto que has ido metiendo los pies en la piscina de la política. Caldera decía que  luego que te empiezas a mojar, te tienes que tirar completo. Si lo haces o no, te apoyo. Eres un chico inteligente y me gustan tus escritos. Solo quiero que consideres leer y profundizar en la vida y obra de Santo Tomas Moro,  patrono de los políticos y gobernantes. Te resumo algunas ideas que escribió Juan Pablo II sobre él.

“Santo Tomas  (Londes 1478) insistía a los hombres de todos los tiempos de la inalienable dignidad de la conciencia, la cual, como recuerda el Concilio Vaticano II, «es el núcleo más secreto y el sagrario del hombre, en el que está solo con Dios, cuya voz resuena en lo más íntimo de ella»  Cuando el hombre y la mujer escuchan la llamada de la verdad, entonces la conciencia orienta con seguridad sus actos hacia el bien. Tomás Moro es venerado como ejemplo imperecedero de coherencia moral. Y también fuera de la Iglesia, especialmente entre los que están llamados a dirigir los destinos de los pueblos, su figura es reconocida como fuente de inspiración para una política que tenga como fin supremo el servicio a la persona humana.”  

 “El santo insiste a los gobernantes y a los políticos en  la necesidad que siente el mundo de modelos creíbles, que muestren el camino de la verdad en un momento histórico en el que se multiplican arduos desafíos y graves responsabilidades. En su época, el pensaba que había una opinión pública desorientada y exigía con urgencia opciones políticas claras en favor de la familia, de los jóvenes, de los ancianos y de los marginados.”

“En este contexto es útil volver al ejemplo de santo Tomás Moro, que se distinguió por la constante fidelidad a las autoridades y a las instituciones legítimas, precisamente porque en ellas quería servir, no al poder, sino al ideal supremo de la justicia. Su vida nos enseña que el gobierno es, antes que nada, ejercicio de virtudes. Convencido de este riguroso imperativo moral, él puso su actividad pública al servicio de la persona, especialmente si era débil o pobre; gestionó las controversias sociales con exquisito sentido de equidad; tuteló la familia y la defendió con gran empeño; promovió la educación integral de la juventud. El profundo desprendimiento de honores y riquezas, la humildad serena y jovial, el equilibrado conocimiento de la naturaleza humana y de la vanidad del éxito, así como la seguridad de juicio basada en la fe, le dieron aquella confiada fortaleza interior que lo sostuvo en las adversidades y frente a la muerte. Su santidad, que brilló en el martirio, se forjó a través de toda una vida de trabajo y de entrega a Dios y al prójimo.”

Culmina la nota: “Estimado Luis: Es importante que tengas claro que el hombre no se puede separar de Dios, ni la política de la moral. Ésta es la luz que iluminó su conciencia. Anda con calma y cautela, escucha tu conciencia y no dejes de seguirla. Te sigo y te bendigo”  Padre Francisco. 

Fundado hace 28 años, Analitica.com es el primer medio digital creado en Venezuela. Tu aporte voluntario es fundamental para que continuemos creciendo e informando. ¡Contamos contigo!
Contribuir

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Te puede interesar
Cerrar
Botón volver arriba