Opinión Nacional

La revolución inmunizó a Venezuela

La inseguridad rompió records, a los ciudadanos los matan en las calles como si fueran perros y el Plan Venezuela Segura es solo propaganda porque los homicidios continúan como si nada. Revolución es inseguridad.

La falta de alimentos y sus precios cada día más altos, no lo detiene ninguna ofensiva económica, pura propaganda, porque el sistema económico que se ha querido imponer es la causa de la escasez y de los precios cada vez más altos. Revolución es hambre

El despojo de la soberanía de que ha sido objeto el pueblo venezolano por un solo ciudadano, el autócrata, a través de un árbitro parcializado nos deja inmunizado frente a la práctica de simular democracia mientras se impone una autocracia. En esa trampa no caeremos más nunca. Revolución es pérdida de la soberanía.

El control de los medios de comunicación, para vender después como verdades todas las mentiras que quiera difundir el régimen, nos coloca en estado de “alerta máxima” que nos permitirá no ser engañado nunca mas por una propaganda oficial que tiene poco de verdad y mucho de mentira. Revolución es falta de libertad.

El control de los poderes del Estado por el Poder Ejecutivo que padecemos desde hace años deja sin derechos al ciudadano quien pasa a ser manipulado por una indefensión total pues no tiene la protección propia de un Estado de Derecho ya que éste no obedece a la Constitución sino a la voluntad del autócrata que es quien maneja el Estado. Revolución es dictadura.

La propaganda del régimen se maneja no para difundir sus logros sino para suplir lo que no se hace a punta de publicidad y de promesas que después no se cumplen sino que son sustituidas por otras nuevas que corren la misma suerte. Por eso “hacer que se hace” aunque no se haga nada es lo que justifica esa intensa propaganda. Revolución es mentira.

La cultura democrática creada durante cuatro décadas funcionó como una barrera contra la imposición de la autocracia y por esto no solo fue rechazada sino que hizo mas eficaz la vacuna contra cualquier intento futuro de imponer, a través de un golpe o engañando, un régimen diferente a la democracia en Venezuela. La revolución nos vacunó.

El populismo es otra epidemia que difícilmente se repetirá en Venezuela después de estos quince años de revuelta populista y demagógica. Promesas a montones. Propaganda lo mismo. Pero faltó ejecutar políticas que fueran de verdadero beneficio popular. No basta colocar un P.P. en todas partes si después el pueblo no recibe los beneficios que se anuncian. Que se repita otro gobierno populista no será fácil pues será descubierto de inmediato. Revolución es populismo.

 

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