Opinión Nacional

La soledad

Una persona cualquiera puede no solamente sentirse sola, sino estar sola aunque este con Dios. Al Creador le pareció que el hombre estaba solo en el Edén a pesar de que Dios estaba con el, por lo cual crea otro ser humano igual al primero para que le brinde compañía. De allí que una persona cualquiera cuente o testifique que sintiéndose sola alguna vez, alguien toco a su puerta o le telefoneo o envió un texto o un correo electrónico o se cruzo en su camino y le hablo de tal o cual forma que le hizo recobrar la perspectiva espiritual de su existencia. Los hay también quienes abrumados por su soledad no tuvieron la fortuna de ser escuchados a tiempo para relatar su historia, sino que se adelantaron y tomaron una determinación trágica con sus propias vidas.
En esta era moderna caracterizada por lo inhospitalidad y la indiferencia de la gente, Dios se sirve mas que nunca de la palabra hablada para acercarse “en persona” con una voz de aliento a aquellas almas que han perdido el entusiasmo, la fe y la esperanza. Es tal la importancia del ser humano en el concierto de la naturaleza creada, que Dios debió humanarse en la persona de Cristo para tratar con sus criaturas a fin de rescatarlas del abismo y retornarlas a la vida eterna. Entonces, el hombre o la mujer pueden estar con Dios y a la vez sentirse solos, ya que el ser humano fue creado para interactuar con los de su misma especie y no tan solamente relacionarse con el Espíritu de Dios.
Muchas personas en el mundo, sea que se trate de moros o de cristianos, suelen eludir su responsabilidad social con sus pares y aun con sus propios correligionarios, argumentando que el que esta con Dios no necesita compañía. De haber sido así, repito, Dios no se habría humanado, sino abierto la cortina de los cielos para mostrársenos tal cual es. Cuando todos los recursos humanos habidos y por haber se hayan agotado, entonces Dios se servirá de un ángel si es necesario para preguntarle a un Saulo De Tarso (Pablo el apóstol ): “Por que me persigues…?” O se valdrá hasta de un animal para persuadir a Balaam, un profeta codicioso, para que desista de su error. Porque, el día que los hombres callen, Dios hará que las piedras hablen y la tierra tiemble. 

Fundado hace 28 años, Analitica.com es el primer medio digital creado en Venezuela. Tu aporte voluntario es fundamental para que continuemos creciendo e informando. ¡Contamos contigo!
Contribuir

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Te puede interesar
Cerrar
Botón volver arriba