Las memorias y cuentas de los Ministros
Según lo establece el artículo 244 de la Constitución Nacional, los
ministros (as) deberán presentar ?ante la Asamblea Nacional, dentro de los
primeros sesenta días de cada año, una memoria razonada y suficiente sobre
la gestión del despacho en el año inmediatamente anterior, de conformidad
con la ley?. Aun cuando la constitución no lo establece (lo cual no tiene
mayor importancia para un gobierno revolucionario), el pasado 26 de febrero
el ciudadano coronel Ramón Carrizález, vicepresidente de la República dio
el
discurso de presentación de la memoria y cuenta del gabinete ejecutivo de
2008 ante la AN. Tiempo seguido cada uno de los 27 ministros del popo, casi
la mitad de ellos militares y todos rojos, rojitos, en perfecta formación,
fueron entregándole a la ciudadana presidenta de la AN los tomos
correspondientes de sus respectivas gestiones.
Como comentario al margen vale la pena referiremos al discurso del coronel
vicepresidente, y ahora encargado del popo de la Defensa. En verdad fue una
de esas piezas oratorias pobres que lo único aceptable fue lo corto de la
misma. En vez de dar un mensaje de ejecutorias y logros, pocos pero algunos
debió haber, le cayó a palos a la oposición, en especial a aquellos que
están reclamando diálogo en función de haber sido electos
democráticamente,
por el propio soberano, para ejercer cargos en gobernaciones y alcaldías.
Repitió, como es costumbre en la revolución, lo dicho por el jefe único y
máximo, ?están solicitando el diálogo con las cúpulas?No? Dijo que
no
dialogarían con Ledezma, ni Pérez Vivas, ni Capriles, por cuanto ellos no
representan a nadie. ¿Y los que votamos por ellos, qué? Y claro también
palo con los medios, el imperio, el pacto de Puerto Rico, la CIA, y la
oligarquía nacional y universal.
Lo que no suponían ni los ministros ni la directiva de la AN, es que un
periodista travieso, esos pagados por los medios golpistas, sustrajo una
copia de uno de los tomos de un ministerio (por cierto que esos documentos
deberían ser públicos como era antes) y se dio banquete con el contenido.
Según me cuenta, el encabezado del tomo sustraído comienza con frases del
teniente coronel felón, pasajes de sus infancia, juventud, mocedad,
adultez,
juramentos y triunfos militares y retratos de civil, en uniforme de
campaña,
en uniforme de gala, de paracaidista, con toga. Luego frases de Bolívar
(si, en segundo plano), de Rodríguez y de Zamora. Fotos del Che y Fidel.
Unas de Marulanda, Reyes y Piedad. Muchas fotos de marchas multitudinarias,
rojas, rojitas. Obras ejecutadas en Cuba, Nicaragua, Bolivia, Ecuador y
Argentina. La represa del Guri, o sea la de Raúl Leoni; el metro de
Caracas, o sea el de Luis Herrera; La autopistas La Guaira-Caracas, de mi
general, la Regional del Centro, de Betancourt, la Rafael Caldera. Las
Torres del Centro Simón Bolívar, el Parque del Este, el puente sobre el
Lago
y bueno, otras tantas obras que la revolución les cambió de nombre, para
gloria de la misma. Asistencia a los programas de Alo, Presidente, viajes a
Cuba y a Palestina, firmas de contratos de cooperación donde la república
bolivariana pone los cobres y los otros países los bolsillos. Asistencia a
cadenas y eventos similares. Número de veces que el ministro ha proferido
insultos al imperio y amenazado a los escuálidos. Al final del tomo otras
frases y fotos del teniente coronel y de Fidel. Y la promesa de que ahora
en esta nueva década si se resolverán todos los problemas de la nación,
bueno los pocos que quedan sin resolver. Y una nota final indicando que solo
contiene su gestión, que la de los otros cinco ministros que pasaron por el
cargo durante este año no dejaron ni un papelito.
La presidenta de la AN, al entrarse de la sustracción, ordenó prohibir la
presentación de las Memorias y Cuentas de los ministros por escrito.
