Los trabajadores y las primarias
Para los trabajadores y sindicalistas como representantes de centenas de miles de jóvenes, de agremiados tanto del sector público, del sector privado y la economía informal, los desempleados como efecto de las nefastas políticas económicas de quienes gobiernan Venezuela en los últimos 13 años la elección presidencial es crucial
Hoy con dramatismo se observa que tras 13 años de gestión gubernamental la ilusión se ha convertido en pesadilla para todos. En Venezuela se contabilizan 13.300.000 trabajadores y sólo tienen un empleo formal 6.000.000, el resto 7.000.000 se encuentra en la economía informal o desempleados, cada vez con menor oportunidad ante el cierre de miles de empresas privadas y excluidos sin protección alguna de leyes laborales y de seguridad social. De aquellos que tienen un empleo formal laboran en el sector público 2.500.000, a quienes el Estado debe 18 millardos de dólares en pasivos laborales acumulados desde 1997, y para colmo no se reconocen los contratos colectivos, y cuando se discuten como el caso reciente de los Educadores se establece un convenio por debajo de la inflación. Estando destinados sólo a esperar que en un “Alo Presidente”, éste aumente caprichosamente un porcentaje salarial que no dignifica nuestra condición de trabajadores.
En el sector privado aproximadamente 500.000 trabajadores tienen un contrato colectivo, la mayoría en óptimas condiciones, el resto 3.500.000 depende de decretos unilaterales presidenciales y la discrecionalidad patronal. El resultado es que el salario mínimo es hoy de 1550, BsF. y la cesta alimentaria ronda los 3.500 Bs. F. y la Cesta básica los 7.000 Bs. F., agravando el poder adquisitivo una inflación incontrolable y una política tributaria del neoliberalismo salvaje tan atacado en el discurso presidencial.
En definitiva, el paraíso prometido años atrás se ha convertido en terrible fraude, por ello los conflictos en las calles de Venezuela sobre todo en los últimos 3 años de 2008 al 2011. Miles de protestas públicas sacuden el territorio nacional, luchas de los trabajadores de Guayana en defensa de las Empresas Básicas y contratos colectivos, Petroleros por sus derechos laborales, la reciente del Transporte por el derecho a la vida y pago de subsidios, los de la Polar, Harina y Agroisleña contra las expropiaciones salvajes. Siendo la respuesta estatal atropellos contra los sindicatos, prisión para compañeros sindicalistas, citación permanente a tribunales, impunidad del sicariato que ha enlutado a centenas de familias y la amenaza continua de expropiaciones. La desesperación laboral ante la ofensiva estatal es de tal magnitud, que se han realizado decenas de huelgas de hambre, huelgas de sangre, y enfermeros, trabajadores y estudiantes universitarios se han cosido los labios por un trabajo digno y por un presupuesto justo.
Por tales razones el escenario de las primarias es una oportunidad enorme para reconquistar la democracia con un candidato de los trabajadores.
