Malvenido el Comunismo
Pienso que a estas alturas de la revolución socialista del siglo XXI muy pocos habitantes de este país deberían tener alguna duda de hacia donde nos lleva el teniente coronel. Durante más de una década el proyecto se ha venido cumpliendo casi al pie de la letra, algunas veces un paso hacia atrás y de inmediato la arremetida, varios pasos hacia adelante. En mayo de 2000, recién promulgada la nueva constitución, la bicha, la mejor del mundo, en un paraninfo intitulado “La Vaselina y el Proyecto de los Comandantes” escribía: “Y así pasan los días y nosotros desesperando. Esperando sin fumar, por lo caro que están los cigarrillos, confiando en la divina providencia, en un milagro. Que Fidel llame al comandante a su mar de felicidad o que Tiro Fijo lo designe presidente del partido bolivariano o lo nombren Secretario General del Tercer Mundo. Pendejos que somos. Con o sin vaselina, la revolución pacífica avanza más rápido de lo que pensamos, sin necesidad de un tiro. Al final diremos: “si nos hubiéranos dao cuenta no nos hubieran encanao”, lo que me acarreó muchas críticas y acusaciones de adeco resentido. Lamentablemente y sin presumir de futurólogo, la premonición se ha venido cumpliendo. Fidel lo ha designado su heredero universal, Tiro Fijo, por causas personalísimas, le cedió su cargo, y el mundo entero lo aclama como el “gran revolucionario”, “el salvador del mundo”, el “enterrador del imperialismo”.
Indiferentemente de lo que algunos analistas y dirigentes políticos opinan, la ortodoxia comunista se ha venido cumpliendo a cabalidad. El régimen del teniente coronel cada día se parece más al que existe en la Cuba fidelista. Puro castro-comunismo. Ya del país democrático que conocíamos solo nos queda la creencia de unos pocos que serán enterrados en urnas blancas. La hipocresía de algunos poderes para esconder su sumisión ante el poder central, el del comandante del proceso, desapareció. El TSJ reconoce que no debe haber división de poderes. La fiscalía y los jueces reciben de Miraflores las instrucciones para actuar. Lo de la AN es ya de vieja data. El Contralor inhabilita de acuerdo a los dictados del PSUV, igual conducta la tiene el CNE. Éste último reformula los circuitos electorales según las cuentas que saca la sala situacional del gobierno.
Los amigos del gobierno, una vez utilizados, han vendió siendo descartados. Unos presos, otros exiliados y algunos execrados. Políticos, militares, banqueros, comunicadores, profesionales, dirigentes empresariales, sindicales y campesinos, izquierdistas e izquierdosos, revolucionarios y guerrilleros, han venido siendo enviados al cesto de la basura por contradecir, aun en nimiedades, al supremo. Todos votaron por él y hoy comienzan a purgar sus penas. “Es que yo creía”; “es que aspirábamos a un cambio”; “es que los adecos y copeyanos iban a acabar con el país”; “es que la corrupción no se aguantaba”. Farsantes. Si algo hay que se le debe reconocer al teniente coronel felón es que nunca ha escondido sus intenciones. Recordemos los decretos incautados después del golpe del 4F, el discurso en la Universidad de la Habana, sus peroratas maratónicas, sus reacciones ante cualquier evento desfavorable a su proyecto, sus llamados a la FAN, sus bandas paramilitares, sus compras de armamentos, sus amigos internacionales, todas sus actuaciones en estos once años nos señalan claramente a donde nos lleva.
Los gafos piensan que es que este gobierno es malo, es corrupto, ineficiente e incapaz, que es más de lo mismo o peor. Seguro que es de todo eso y mucho más, pero el detallito que hace la diferencia es que nos lleva derechito a un régimen comunista, si al COMUNISMO. Y los regímenes comunistas no pierden elecciones. 2010 nos deparará grandes batallas. Año crítico. O nos planteamos bien el problema o no podremos resolverlo. Por cierto alguno de ustedes ha pensado que pueda repetirse aquella imagen quinquenal de la IV, donde alguien le traspasaba a otro la banda presidencial en acto voluntario y pacífico. Seguro que si bobolongo.
