Mediocridad política y pérdidas de libertades
El país está en manos de unos políticos de la vieja izquierda y de unos militares rapaces e incompetentes, que aprovechándose de la indigencia y las necesidades de la población, han puesto en práctica las llamadas misiones, que no son más que una versión ampliada del régimen clientelista electoral, que se ha profundizado y mantenido, gracias a los recursos petroleros, cuestión ésta, que les permite manipular, las carencias materiales de vida de una vasta población, en favor de sus intereses políticos hegemónicos.
Mientras la cultura política del venezolano común, continué siendo deficiente, y sus necesidades se hagan más agobiantes y el oficio de la política siga siendo ejercida por políticos populistas y limitados intelectualmente, el país continuará empobreciéndose, pues la derivada de ésta realidad, son gestores políticos de trámites clientelares, sin una visión clara de las necesidades de desarrollo del país en su concepción ampliada, es decir, desarrollo productivo, desarrollo cultural, desarrollo social, entre otros. Esto no será posible, mientras persita la orfandad intelectual de nuestros políticos, pues cuando el poder es analfabeto, la mediocridad y el atraso se imponen, puesto que el análisis y la discusión están vacíos de contenido, lo cual no deja pistas, para la trascendencia del país, y ello es el resultado de la pobreza intelectual de nuestros políticos, que aficionan el poder, por el poder mismo
La mediocridad política del país, se ha amplificado en este régimen; el gabinete ministerial donde destacan el Canciller, el Vice-presidente, el Ministro para la Salud, La Asamblea Nacional, el Fiscal del Ministerio Publico, el Contralor de la República, el Defensor del Pueblo entre otros, son vivos ejemplos de lo acá que afirmamos. Si a la situación anterior le agregamos, la posición absurda y destructiva de las ideas “revolucionarias” del Presidente de la República, contrarias a las libertades públicas y a los equilibrios sociales requeridos para el funcionamiento de una democracia, tenemos el escenario servido, para la ruptura del sistema de las libertades democráticas y la profundización de la mediocridad política del país. Los venezolanos ante ésta realidad, no tenemos más alternativa, que “volar” los puentes que nos conduce hacia la dictadura fascista.
