Miquilena: No me acusan de dolo, pero acataría la decisión del tribunal
Luis Miquilena rechazó la tesis de la Fiscalía de que él aún era accionista de la editora Micabu en 1999 y que utilizó su cargo para favorecerse, y, en consecuencia, debía ser juzgado por el Tribunal Supremo de Justicia.
En la querella «no hay acusación de dolo; sólo se señala que la venta de las acciones no aparecen en el libro de registro, pero con eso no hay problema, porque el asiento en el libro no era necesario (…) Sobre esto se armó una alharaca, pero yo no estoy involucrado», ripostó el presidente del Congresillo al ser consultado sobre el documento que consignó el fiscal Javier Elechiguerra ante la Sala Penal del máximo tribunal, en el cual solicita un antejuicio de mérito.
«El fiscal se dejó, desde hace tiempo, influir y presionar, sin duda alguna para decir que no es legal la venta de las acciones. Ese es el único problema que está en discusión», afirmó Miquilena, quien alega que está probado «hasta la saciedad» que el paquete accionario fue vendida hace más de un año y que se cumplieron todos los trámites ante las notarías y registros.