¡No! militar a la reforma

EXORDÍO: Definitivamente la sorpresiva manifestación pública del Gral. en Jefe (Eje) Raúl Baduel de traicionar a su tradicional compañero Hugo Chávez es una prueba mas de mi teoría de que los militares activos no están apoyando a este gobierno pero que no están dispuestos a darle un golpe de estado “por ahora……. “. Du.l,,dar de la sinceridad de su posición es no conocer la esencia de lo que es ser Militar.

¿Qué ES UN MILITAR? Ser militar es una condición especial para un ciudadano de cualquier país. Esa profesión requiere de poseer cualidades específicas no comunes al resto de los ciudadanos. Requiere vocación, o sea la convicción de que es esa la profesión que va a ejercer toda su vida, consciente de que sus principios y filosofía son las que se identifican con su forma de pensar y de que sus normas las que se identifican con la conducta que tendrá que acatar por el resto de su vida. Es la única profesión en la que pones en un cheque en blanco la vida que hace votos en función del amor al país y por eso yo bautizo al militar como un “sacerdote de la patria”. La filosofía del militar no puede ser otra que el beneficio a la nación a la que jura servir junto con la lealtad a la constitución y las leyes. Así el militar es un funcionario público sin horario, sin calendario, disciplinado y “obediente”, o sea que tiene que cumplir ciegamente lo ordenado y no puede exteriorizar sus inconformidades, no puede protestar, ni prácticamente reclamar.

LOS MILITARES PIENSAN: Los militares no son robots, ni máquinas, su obediencia no le permite exteriorizar sus ideas pero eso no significa que no piensan, eso no significa que no sienten, los militares sienten mucho más que el normal de los venezolanos las amenazas que pudiera sufrir este país. Se equivocan los gobernantes cuando, producto de la obediencia, ven a un militar manifestarse a su favor, porque eso solo obedece a un principio de disciplina militar “los deseos de los superiores son órdenes para sus subalternos”, pero ello no significa que estén de acuerdo y mucho menos que compartan esos deseos y Baduel es la mas vívida demostración de ello.

UN CAMBIO DE PARADIGMA: Un militar llega a la presidencia, los militares pensamos que eso sería la solución para la institución, pensamos que se recuperaría la ética, la moral y la recuperación de la meritocracia, así como el reconocimiento de nuestros beneficios sociales. Pues no, el remedio fue peor que la enfermedad el colega se ha dedicado a destruir la institución como tal, se ha dedicado a convertir el militar en miliciano al servicio de sus intereses personales, tratando de esta manera de romper el paradigma de los principios y la filosofía militar, ruptura que estaría formalizada legalmente en esta reforma constitucional a la cual los militares juramos defender creando así un nuevo conflicto de interpretación institucional. ¿Tienen que defender la constitución?, ¡pues entonces defiendan esta! La mía, diría el presidente.

NO PUEDEN APOYAR LA REFORMA: Por razones de espacio no puedo publicar en este escrito los detalles del porque los militares se van a oponer a esta reforma, pero puedo resumir que nadie que sea medianamente culto, pensante, puede estar de acuerdo con una reforma del sistema político, económico y social venezolano que tradicionalmente ha estado basado en la libertad de los hombres, en la pluralidad, la democracia, la paz, la unión y la convivencia de los venezolanos; principios que mal que bien se habían mantenido desde la independencia de este país para convertirlo en un sistema autocrático, dictatorial, comunista, con la única finalidad de satisfacer las pretensiones e intereses personales de un hombre que solo busca mantenerse de por vida disfrutando de los beneficios del poder que democráticamente le dimos los venezolanos. Los militares no se chupan el dedo, soy un convencido de que esta reforma puede ser el principio del fin de Chávez, si insiste en sus obscuras pretensiones. Los militares no van a ir a una plaza a manifestarse y si el 4 de Febrero y el 27 de noviembre hubo causas razonables hoy permanecen vigentes las mismas causas y, peor. Los dictadores no entregan el poder por la vía democrática en la mayoría de los casos siempre es producto de la insurrección militar que se pone al lado de la voluntad popular manifestada, sublevada. Para ello debemos organizarnos, ¡Que esperan! Mas muertos en manifestaciones, una escalada de respuestas violentas del oficialismo. Escríbame hay otro método que nos dará la victoria.

CADELA BARINAS: Finalmente se reivindica esta empresa con la moralidad, al parecer le fue pasada la carta de despido al Sr. Charmelo Rodríguez reiteradamente acusado de hechos irregulares en esta empresa. Ah, pero como todo en esta robolución, el sindicato chavista que se maneja en esta empresa según mis detectives está escondiendo la calificación de despido que ordenó la Contraloría General de la República para buscarle una jubilación y pueda salir con penas pero con glorias. Los denunciantes esperan porque le corten igualmente la cabeza al Jefe quien según ellos fue el que firmó los vistos buenos a las obras que ejecutaba y que ordenaban los pagos a las cooperativas cuyos miembros también son cómplices del defalco.

EL PODER CUBANO: Los vecinos de la urb. Rodríguez Domínguez, si, ahí donde crecieron los Chávez, los Carreños y otros robolucionarios se quejan de que no consiguen los productos básicos de la canasta alimenticia, como leche, huevos, pollos, carne, etc., en los MERCAL del estado. Ahora en una casa de esta urbanización viven dos hermanas quienes son profesionales, tienen sus carritos pero que según los denunciantes se quedaron como niñas viejas y por eso fueron blanco de dos cubanos, de esos que están en la Misión Deporte, quienes ni corto ni perezosos las enamoraron y se fueron a disfrutar de sus tres C (Casa, Carro y Cariño) les faltaba solo la comida, que los cubanos no sabemos como consiguen, los vecinos ven como traen cajas de pollo, súper bolsas de leche, cajas de carne y son tantas que hasta tuvieron que comprar un freezer de tres puertas y montaron una bodega en donde venden estos productos a precios exorbitantes, ¡Que tal!
EPILOGO DEL AUTOR: A pesar de que por amor a mi sistema de libertades me encuentro perseguido por este gobierno, desde la clandestinidad, seguiré publicando mis escritos.