Qué envidia (RCTV)
Viendo las últimas horas de la transmisión de la señal de Radio Caracas televisión, sentí una gran envidia, sí, envidié enormemente a las Empresas 1 BC, por el Presidente que tienen. En una rueda de prensa con periodistas nacionales y extranjeros, en la que se le formularon preguntas incisivas y comprometedoras, no insultó ni humilló a quienes las formularon, no los atosigó con divagaciones estúpidas, ni con anécdotas personales sin importancia para nadie más que él, no los hizo perder su tiempo, ni lo perdió él tampoco, habló poco y dijo mucho. A pesar de ser víctima de una sentencia arbitraria y contumaz del Tribunal Supremo de Justicia, no se refirió a ella llamándola “ plasta “ ni descalificó a los magistrados que la suscribieron, para mencionar al responsable del difícil trance por el que pasan sus empresas y a sus “ musiquitas “en ningún momento personalizó la situación y siempre se refirió a ellos como : el ciudadano Presidente y el señor ministro, no dijo una sola mala palabra, un desplante, una calumnia o una injuria. No se disfrazó de lo que no es, mantuvo la altura y la decencia en todo momento, no se permitió un acto de rebeldía, mas allá de expresar en forma clara y contundente su opinión, no lo vimos mendigar clemencia o comprometiéndose en cosas que no puede cumplir. Sinceramente, lo confieso, la envidia que sentí me hizo recordar el viejo chiste del ebrio que viendo pasar una bellísima mujer exclamó. ¡Que porquería ¡ y cuando alguien le preguntó que por qué decía tal cosa de esa belleza aclaró. ¡Qué porquería, la que tengo yo en mi casa! ¡Qué envidia! ( RCTV)
