Sin destrucción total no hay revolución
Entender que es una revolución es lo primero para poder combatirla con éxito. Una revolución parte de la destrucción del actual sistema para construir después otro mejor que después resulta peor. Venezuela tiene ya trece años viviendo esta primera etapa que llamaron “el proyecto”. Se destruyen las universidades, las organizaciones obreras, se confiscan tierras y empresas, se menosprecia el trabajo de los profesionales, se destruyen todas las instituciones del Estado violando con la Constitución el estado de derecho que se sustituye por otro de “fuerza” y para nada les preocupa el nivel de la inseguridad y la falta de empleo laboral y profesional, de viviendas y la inflación porque mientras mayor sea la inseguridad mas serán los venezolanos capacitados que abandonen el país buscando proteger sus vidas y progresar justo lo que necesita el régimen para que emigren los mas capaces y se queden los menos capacitados que son mas fáciles de someter. La destrucción total de Venezuela es el “portal de entrada” de la revolución. El problema no es solo la incapacidad sino que esa incapacidad es utilizada para aplicar la estrategia de `primero destruirlo todo. En Cuba esta etapa se cumplió en apenas tres o cuatro años y aquí se está haciendo en “cómodas cuotas” porque Venezuela es otro país y el mundo ya no es bipolar. Y por qué los pueblos son engañados y se dejan manejar así? Ahora vamos a eso.
El sistema capitalista privado (liberal) olvidó los valores humanos – dignidad de la persona, justicia, etc.-los desplazó por la riqueza y el dinero. Tener mas como sea sin reparar en el costo social convirtió en una droga al dinero. Unos pocos se enriquecieron y tenían todas las oportunidades en tanto la mayoría se empobreció y no tenía ninguna. Este desbalance le abrió el camino al comunismo y fue así como aparecieron dictadores ofreciéndole milagros a los pueblos que, desesperados, los compró. Esta primera etapa de falsas ilusiones pronto se agota y es sustituida por otra de una gran frustración colectiva porque los pueblos no mejoran sino que empeoran su nivel de vida y pierden las libertades. Esto ocurre porque los nuevos oligarcas concentran poder político mas poder económico-totalitarismo- y entonces el ciudadano queda aplastado por una situación de fuerza. Pasa a ser un esclavo y a tener hambre. Caso cubano. ¿Y por qué ocurre esto? Porque el comunismo no reconoce los valores superiores de la persona y la considera un objeto más. Es así como los pueblos pasan de Guatemala, el capitalismo, a Guatepeor, el comunismo.
Frente a este dúo que ignora por igual la dignidad de la persona y sus derechos, tanto naturales como legales, no queda otra alternativa que impartir una educación cristiana sólida que siembre valores a través de la familia y la escuela, para que podamos salir de la revolución liberal del capitalismo y la revolución marxista del comunismo, pues la primera se droga con el dinero y la segunda con el poderío y pasa a ser una fuerza bruta armada. En Venezuela, que tiene una larga cultura democrática, se está enfrentando esto únicamente con la unidad del sector político. Es insuficiente. Dada la naturaleza de este régimen creemos que se requiere también unir en un solo bloque al sector social, que no representa al país sino que ES EL PAÌS a través de una Mesa de la Unidad Social (MUS) que le deje muy claro al C.N.E. que el único soberano que hay aquí es el pueblo venezolano y que la voluntad que éste exprese el 7 de Octubre tiene que ser proclamada.
Profesor de Instituciones
Políticas de la U.C.A.B.