Opinión Nacional

Venezuela en el ojo del huracán

Caracas (AIPE)- Superada la tensión constante de los días del Paro Cívico, algunos venezolanos se esmeran por retornar a la cotidianidad, a la rutina diaria del ciudadano común ajeno a las responsabilidades del liderazgo. Al no haberse materializado aún la escasez y el desabastecimiento que todos esperan, luego de la torpe implementación de controles cambiarios, y dado el hecho que el gobierno ha logrado, a un enorme costo para la nación, disminuir el desabastecimiento de gasolina, algunos venezolanos creen que lograrán escapar ilesos a la crisis nacional. Como los valientes pescadores de aquella famosa película, “La tormenta perfecta” esas personas parecen ignorar que la calma que se percibe en el ojo del huracán terminará súbitamente con la llegada de la peor parte de la tormenta.

En lo económico apenas se ha comenzado a sentir el descalabro sufrido por la nación. Expertos internacionales estiman la caída de la economía venezolana entre 20% y 42% del PIB. Estas son magnitudes equivalentes al descalabro sufrido por las naciones derrotadas en las guerras del siglo XX. En poco tiempo la realidad humana que se esconde detrás de esas cifras tan espantosas será imposible de ignorar. El hambre aparecerá en Venezuela como nunca antes. Al mismo tiempo, la situación financiera del Estado se tornará desesperada. Luego de haber sufrido una enorme pérdida de ingresos por renta petrolera, el fisco ahora comenzará a percibir la magnitud del hundimiento de la economía real, cuando contabilice el colapso de la recaudación por IVA. Pronto los tradicionales déficit de caja y atrasos en las nóminas de los organismos públicos se harán nuevamente presentes, pero en magnitudes insospechadas. Ante la poca demanda, buena parte del comercio tradicional cerrará sus puertas, y apenas 3 de cada 10 venezolanos tendrán empleo formal.

En el campo político, el ensañamiento contra Fedecámaras y la Confederación de Trabajadores de Venezuela, las tácticas dilatorias para impedir un referéndum revocatorio, la burda manipulación del sistema judicial y la continua violencia del discurso presidencial aseguran un clima político de inusitada confrontación en el futuro cercano. Los intentos de algunos políticos avezados por adueñarse del “centro”, ubicándose entre “radicales” de ambos bandos, fracasarán. El país terminará totalmente dividido en dos polos. Uno, minoritario pero con el poder del Estado y otro sin armas, pero con el poder de los números. La crisis política terminará cuando uno derrote al otro. La crisis económica sólo será superada cuando la nación abandone de una vez y para siempre toda la filosofía política que han defendido toda la vida hombres como el vicepresidente José Vicente Rangel y Hugo Chávez. Sólo con la liberación total de todas sus fuerzas productivas podrá Venezuela recuperarse de la plaga que destruyó su otrora pujante economía. Sólo así nos salvaremos del hambre y la miseria.

(*): Dirigente empresarial venezolano.
(**): Publicado por cortesía de la agencia (%=Link(«http://www.aipenet.com»,»AIPE «)%)

Fundado hace 28 años, Analitica.com es el primer medio digital creado en Venezuela. Tu aporte voluntario es fundamental para que continuemos creciendo e informando. ¡Contamos contigo!
Contribuir

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Te puede interesar
Cerrar
Botón volver arriba