Violencia: causas y responsable
Es doloroso ver cómo Venezuela vive un proceso de violencia, porque no solo se trata de un problema de crimen, sino que la enfermedad de la violencia se ha metido en nuestro país y en la cotidianidad, incluso en las familias y en las escuelas.
Hace pocos días una persona fue asesinada y le propinaron 40 tiros en la cabeza. Hay que ver lo que significa eso, no es solo el delito o el crimen, sino la saña, el desprecio por la vida.
El Presidente dice «que se está trabajando duro con el tema de la inseguridad», pero en la realidad no se está haciendo nada. Cuando el Mandatario estuvo en la Asamblea presentando su Memoria y Cuenta el 13 de enero de este año, prometió que se iba a crear la Misión Seguridad, han pasado los meses y nada.
Para que saquen sus propias conclusiones, les presento las cifras de inseguridad en Venezuela tras 13 años de gobierno: en Venezuela ocurre 1 homicidio cada 30 minutos. Con 48 homicidios por cada 100.000 personas, Venezuela tiene la cuarta mayor tasa de homicidios en el mundo.
La tasa de homicidios en el país desde 1998 se ha triplicado. Desde 1998 han habido más de 135.000 homicidios en el país o 53 asesinatos diarios. El 91 por ciento de las personas que cometen homicidios quedan impunes -sin nunca ser juzgados o ver una prisión. De 18 planes de seguridad presentados, 18 planes de seguridad que han fracasado.
De 15 a 20 por ciento de los crímenes en el país son cometidos por policías. Según los resultados de una encuesta de victimización realizada por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), difundidos en 2010, «43,63% de los encuestados no denunciaron un delito porque sabían o creían que la policía había participado. En el 2011 hubieron 1.150 secuestros en el país.
Es por ello, que entre nuestras propuestas para combatir la inseguridad resalta: la Ley Desarme, bandera de la tolda amarilla, tenemos años pidiendo el desarme, pero el Gobierno tiene esta ley engavetada, proponemos también la prevención del consumo de drogas, la prevención de la violencia contra la mujer, implementar jueces de paz en las comunidades, aumentar el número de jueces y fiscales, mejorar el sistema carcelario, lograr una policía acorde con el problema de violencia, e invertir más en tecnología. ¡Merecemos vivir mejor!
