Voto… No Bota
Resulta sorprendente y hasta inexplicable la pobre estructura política e institucional de algunos sectores de la sociedad venezolana que se evidencia ante el mayor fracaso que gobierno alguno haya tenido en nuestra historia republicana y que se patentiza con la búsqueda o el deseo por un CUARTELAZO o GOLPE militar para así subsanar nuestra sistemática y cada día mas grave displicencia electoral. Los militares llamados a sustituir el VOTO por la BOTA ni deben sentirse apoyados para darnos la solución a nuestra inmadurez institucional e inconsistencia política, por el contrario es un irrespeto a su condición particular y muy especial de servidores de la patria.
Hace poco elegimos a golpistas fallidos, políticos fracasados y oportunistas, les endosamos irresponsable y emocionalmente nuestra confianza y esperanzas creyendo en un incapaz camuflado de líder y calificado como el GRAN COMUNICADOR (?) Erramos … , Era necesario «una forma de gobierno» conformado por venezolanos capaces, idóneos, mentalmente equilibrados y dispuestos a conformar equipos de alto desempeño cuyo común denominador fuera: unión, confianza y trabajo… ¡tremendo desatino!
En dos días iremos de nuevo a votar (técnicamente diferibles) esta vez, con el aderezo de la ineficiencia, la incapacidad, la mentira, el desorden y por añadidura, con el espanto del fraude electoral con boina roja al acecho en cada centro de votación.
Se respira un ambiente pesado y es evidente, que cual barco al garete, el país transita inexorablemente, sin gobierno y sin faro que lo oriente. ¿Qué hacer? La respuesta esta en nosotros, VOTAR, pero VOTAR masiva y conscientemente. Derrotemos la apatía electoral que nos acompaña, acabemos con la ineficiencia y la improvisación del Gobierno, botemos el lastre que nos detiene y hace pesada nuestra marcha al desarrollo.
No podemos rendirnos y apoyar un cuartelazo, en el 92 viví de cerca los eventos insurreccionales, vi como el alto mando militar de entonces actuaba pasivamente (excepto la Guardia Nacional y su comandante) y hasta temerosos de perder sus cargos, ante la evidente falla de la responsabilidad que les era inherente, no fueron juzgados y ni siquiera renunciaron.
Hoy poseemos una débil frazada que nos cobija democráticamente, no creo en la solución que otros ingenuamente acarician, podría haber una intervención militar, si la escalada de conflicto social se agudiza, amenazando la vida y bienes de los venezolanos, si esto llegase a ocurrir, será necesario extirpar quirúrgicamente los focos del conflicto, para así reducir la tensión, erradicar el peligro social y retomar la paz.
Finalmente: VAMOS A ACHICAR SENTINAS… con el voto y así botar a los asaltantes del Estado y de la sociedad por ineficientes.
Vice almirante
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