OpiniónOpinión Nacional

Orientación 101

En un mundo donde absolutamente todo parece haber perdiendo su marco de referencia, donde todos los límites están siendo rebasados, desde la política, los negocios, la tecnología, el arte, la cultura, las costumbres y hasta las relaciones; ¿cómo podemos orientarnos y tener un pie firme en algo que asemeje un punto de referencia?

Lo básico de la orientación son las coordenadas, por tal necesitamos dos meridianos, el Vertical y el Horizontal, sin ellos estamos absolutamente perdidos.

Los básicos de la consciencia

En algún lugar entre China y Nepal, hacia al final de quinto siglo, caminaban dos monjes por un sendero, un anciano junto a un ávido joven aprendiz. Luego de varias preguntas del joven y cortas respuestas del anciano, continuaron un trecho de silencio. Se acercaron a un río donde, a su orilla, estaba una mujer con un pequeño saco lleno de grano. Ella les pidió gentilmente a los monjes si podían llevarla a la otra orilla, ya que las aguas le podían llevar.

El anciano monje cargó con la mujer en su espalda, mientras el joven tomó el saco. Pasaron a la otra orilla. La joven agradeció su gentil ayuda y partieron.

Pasada más de una hora de caminar en silencio, el joven increpó al anciano – ¿Cómo es que la regla claramente indica que un monje nunca debe ver o hablar con una mujer, y UD maestro, no sólo la escuchó, sino que la cargó para pasar el río?

A lo que el anciano monje contestó pausadamente – Yo bajé a la mujer al pasar a la otra orilla, tú en cambio la sigues cargando.

Nuestra consciencia agarra, empuja y tira de situaciones continuamente. Hay algo en nosotros que agarra ciertas experiencias y se niega a soltarlas, aunque sean fogosas, hagan daño o nos afecten negativamente. Por ejemplo, alguien hace algo que nosotros desaprobamos, agarramos la emoción, como un perro con un hueso, no la soltamos hasta “exprimirle todo lo que da”. Sólo para encontrar otra experiencia que empujar, rechazar o aferrarnos a ella y comenzar de nuevo el periplo. Hay muchas razones para ello, pero la fundamental es que estamos desorientados. No sabemos en realidad qué nos hace daño o nos beneficia, porque no sabemos a dónde vamos. Caminamos por los pasillos dentro de un crucero que está en medio del peor huracán, dando tumbos y golpes con todo, sin darnos cuenta de que estamos en peligro, porque no nos asomamos fuera a ver qué está pasando. Como vemos paredes y pasillos y otros parecen compartir contigo una “normalidad”, vamos avanzando hacia el comedor porque “es hora de cenar”. Hasta que un golpe es demasiado contundente: un divorcio, una enfermedad, la pérdida de un ser querido o una tragedia; entonces dicha experiencia nos empuja a ver fuera y reconocemos en el horizonte las olas que sobrepasan la proa y aprietan la integridad de todo el barco.

¿Qué llamas Felicidad?

En principio llamamos felicidad la ausencia de conflicto mezclado con una pizca de sensación de logro y adobado con algo de reconocimiento. Nos es difícil reconocer lo que es felicidad porque no hemos definido clara y precisamente qué queremos.

La Emoción Positiva se define en psicología como una sensación que nos reafirma y nos apoya dándonos una satisfacción del estado y posición de una persona en su movimiento por la experiencia de vivir. Es una sensación derivada de nuestro avance hacia un objetivo definido: nos proponemos reunir un dinero para hacer unas increíbles vacaciones de verano, todos los esfuerzos que me van acercando a la meta me dan un chute y se reafirma mi determinación y promueve en mí la posibilidad de cumplir mi meta, ratificando la experiencia. Pero cuando el objetivo final está difuso, voy como perdido, dando golpes, y reaccionando continuamente ajustando mis actos. Más aun, cuando se hace en coordinación y colaboración con otros, cuando esas metas son compartidas, como una meta laboral, logro en familia, equipo de trabajo o con amigos… mucho más potente es, aumentando aun más su capacidad transformadora; pero además transformado al entorno del grupo o su ámbito social.

Mientras más clara la definición del objetivo y mejor planificadas las acciones, mayor el impacto y trascendencia personal de la Emoción Positiva.

Pero ¿Qué es la Emoción Positiva?

Nos orienta, es un mecanismo de la consciencia para avisarnos que la alineación de mis actos está coordinada con mi objetivo; similar cuando miramos un vaso con agua y estiramos la mano para alcanzarlo para beber: con la Emoción Positiva, nuestra consciencia nos permite alcanzar objetivos abstractos y orientarnos hacia ellos con mayor seguridad. La razón por la que es “positiva” es porque hay un chute de dopamina, y con ello nos reafirma en continuar. La consciencia es sin embargo una Caja Negra que no terminamos de comprender, quizás porque no podemos verla desde fuera y es con ella que aprehendemos objetos y objetivos; vamos, lo experimentamos todo.

Lo que sí sabemos es que la metáfora de sembrar y cosechar aplica en esa “Caja Negra” que nos hace diferentes de todos los otros mamíferos en el planeta. Si actúo escondiendo de mí mismo las razones de mis acciones, todo se termina descuadrando. Por ejemplo, Alguien me reclama una actitud o un acto mío, yo lo siento como un ataque a mi reputación y, por evadir responsabilidad y autoría o reconocer qué había detrás de ello, decido “vengarme” del “acusador”. Entonces comienzo a generar unas actitudes o acciones pasivas-agresivas… lo que estoy haciendo es esconder mis motivaciones en la niebla (Dr. JB Peterson). Por tal ese mecanismo de orientación lo estoy descalibrando, embasuro aquello que utilizo para orientarme, cuando lo hago desajusto precisamente aquello me orienta para encontrar lo que deseo y quiero lograr. No puedo sembrar cardos y cosechar higos en la “Caja Negra” de la consciencia.

Por ello, desde tiempo inmemorial, pensadores de todas las disciplinas han propuesta una normativa ética de actuación, proponiendo transparencia e integridad cómo algo indispensable para transitar una vida que valga la pena, porque es la única manera de que en medio de una tormenta te orientes; saber qué tienes que cargar y soltar es Sabiduría. Y que no te quepa la menor duda, la sabiduría es fruto de relacionar y discernir, durante mucho tiempo, las contradicciones, desajustes y altercados de tus acciones con tus motivaciones y emociones, saliendo a flote al otro lado de esa Caja Negra… el fruto por lo que reconocerás si estás cosechando sabiduría es “sin lugar a dudas” el Agradecimiento y la Bondad a pesar de toda la adversidad que enfrentes.

La Emoción Negativa

Existe la contraparte de la Emoción Positiva, es la que nos avisa que hay algo fuera de lugar. Interesante que, a veces cuando la sentimos, tratamos de taparla buscando objetos de satisfacción o barriéndola debajo de la alfombra para no verla. Muchas veces, y lo digo por experiencia propia, tenemos los avisos que estamos aproximándonos a una colisión y seguimos oliendo las flores… luego suceden los divorcios, los despidos, los dolores que descuadran todos los “arreglos” de nuestra vida y la ponen patas arriba. No sabemos hasta qué punto las “tragedias” que las personas padecen, no son fruto de su desidia y procrastinación.

El compás vital

¿Qué es lo que me permite definir claramente metas que me hacen avanzar en la vida? Como decíamos, hay dos vertientes que alumbran dimensiones inequívocamente importantes: a qué aspiro verticalmente y qué reconozco como importante horizontalmente. A través de todos los golpes y estupideces que he cometido en mi vida, reconozco que hay algo profundamente real que permanece, como si me llamara a que yo cumpliera mi Razón de Ser.

Aquellos que han profundizado un poco en la historia de Hamlet: es la aparición del fantasma de su padre, el Rey Asesinado que le dice: ¡Recuérdate de mí! Ello es el detonante para que Hamlet comience la travesía de su tragedia, pero a la vez complete su linaje real. Al final le debemos a la tradición y ancestros dónde estamos, de ello no cabe la menor duda; renegar de ello, es vaciar tus alforjas y hacer una larga travesía sin provisiones. Descarta lo que no te sirva, pero carga tus alforjas con lo valioso y apto, embarcas en un viaje que terminará en tu muerte y, mal que bien, tus ancestros fueron exitosos sobreviviendo, no te viene mal ser previsivo.

Lo he mencionado antes, no importa si eres religioso o no, si crees o no en Dios, pero el cristianismo ha marcado fundamentalmente la psique de todos los occidentales. Jesús es el Rey Asesinado, esa historia arquetipal nos propone que la vida tiene un componente fundamental de sufrimiento e injusticia y que, si nos conectamos correctamente en una relación con esa parte oscura y orientados hacia la “Verdad”, aunque aparentemente nos destruya, no moriremos completamente, sino que resucitaremos. “Recuérdate de mí” es un llamado de algo muy profundo en nosotros para marcar bien la orientación Vertical y alcanzar nuestro linaje.

Por eso te digo: No te preocupes por tu vida, qué comeremos; ni por tu cuerpo, con qué nos vestiremos. ¿Acaso no vale más la vida que el alimento y el cuerpo que el vestido? Fíjense en las aves del Cielo, que no siembran, ni siegan, ni almacenan en graneros, y tu Padre Celestial las alimenta. ¿Es que no valen ustedes mucho más que ellas? ¿Quién de ustedes por mucho que se esfuercen puede añadir un solo día a sus años? Y acerca del vestir, ¿por qué preocuparte? Contempla los lirios del campo, cómo crecen; no se fatigan ni hilan, y yo te digo que ni Salomón en toda su gloria pudo vestirse como uno de ellos. Si a la hierba del campo, que hoy es y mañana se echa al horno, Dios la viste así, ¡cuánto más a ustedes, hombres de poca fe! No estén, pues, preocupados diciendo: ¿Qué vamos a comer, qué vamos a beber, con qué nos vamos a vestir? Por todas esas cosas se afanan los paganos. Bien sabe tu Padre Celestial que de todo eso están necesitados.

Busquen, pues, primero el Reino de Dios y su justicia, y todo lo demás se te dará por añadidura. Por tanto, no te preocupes por el mañana, porque el mañana traerá su propia preocupación. A cada día le basta su dificultad.
Mateo 6
:25-34

Ese “buscar el Reino de Dios” es la orientación vertical. ¿Qué pones en la cúspide de tu escala de valores? ¿Qué sacrificas para alcanzarlo? Si no lo tienes definido, no te puedes orientar, no sabes qué es apropiado ni que es beneficiosos, cuál es el obstáculo que derivará en una desgracia. Vamos cargando equipaje, sin saber por qué o para qué sirve, y cuando vienes a ver, estás cansado de tanto equipaje que arrastras. Ese “Reino de Dios y su justicia” al que nos invita el Rey Asesinado es lo que nos salva de la tragedia, de la tormenta y nos permite mantener la mirada por encima de las olas.

¿Cuál es el meridiano horizontal?

Lo que nos ubica en un mapa son los dos meridianos, el vertical y el horizontal, sin cualquiera de los dos no estamos en ningún lugar… o estamos en todos los puntos de nuestro único meridiano que sí tenemos marcado, y ese no es ningún lugar que nos pueda ubicar y apoyar para crecer.

Nuestra familia, amigos, relacionados, compañeros de vida o trabajo, todos con los que me relaciono, pueden ser fuente de salud mental y me recuerdan qué está bien y qué no. Me mantienen cuerdo. Somos seres gregarios, criados para vivir en comunidad y con el roce de con quien compartimos camino.

Inclusive, aquel que llamamos amigo, si en verdad es tal, tiene una característica muy particular: es quien no teme ofenderme si necesita apuntar un error o un fallo que ve en nosotros y quién se alegra por aquello bueno y positivo que nos sucede, o nos apoya cuando tropezamos con algo duro.

Interesante que, en el Genesis cuando Dios crea a la mujer, dice: «No es bueno que el hombre esté solo; le haré una ayuda como su compañero» (Gen. 2:18). Esa “ayuda” en hebreo es עזר כנגדו, significa “adversario beneficioso”. Tanto el hombre para la mujer, como viceversa, son adversarios beneficiosos. Necesitamos del “otro” para conectar con el camino y orientarnos.

No soy ajeno a que a veces, nuestros “amigos” y familia, no entienden qué estamos haciendo y nos pueden criticar y desear que no avancemos… a veces porque nuestro camino les recuerda lo que ellos están evadiendo o no haciendo en sus vidas. Por ello, los dos meridianos son indispensables, si el vertical lo tienes claro y bien apuntalado, podrás sortear esa “tormenta familiar” y reconocer que necesitas buscar “otro apoyo”.

La cruz simboliza la Vida

Querido compañero de travesía, la vida son una serie de encrucijadas, dolores y golpes con alegrías y aciertos; todos conoceremos la desgracia más de una vez y tendremos experiencias de profunda alegría también repetidas veces, aferrarnos a una y evitar el otro, es no reconocer que nosotros estamos en el punto donde se cruzan ambos “meridianos” … vamos, las aristas de la Vida se cruzan justo en mí.

Así como la cruz representa los dos meridianos que centran en cada uno de nosotros la Vida, es también símbolo de muerte; aceptar esta realidad, con toda su tragedia y adversidad, con toda las dulzuras y agrados, te permite avanzar más allá de aquello que meramente te permite sobrevivir. Define qué pones en la cúspide del meridiano vertical, lo más claro que puedas; reconoce que solo no vas a alcanzar hasta dónde vale la pena llegar, ábrete a la magia que conlleva aceptar la cruz que te toca vivir. Sólo tú puedes transformar tu vida y afectar todo tu entorno con tus decisiones y acciones.

Próximo martes…

El lienzo y los colores con los que pinto

La sangre artística corre por mis venas, no por ser descendiente de Emilio Boggio, sino porque soy parte de la humanidad y todos pintamos nuestra vida con los colores que escogemos.

EL PUNTO a la i

El historial de la columna está en cdots.substack por si quieres revisar artículos anteriores.

Los comentarios, textos, investigaciones, reportajes, escritos y demás productos de los columnistas y colaboradores de analitica.com, no comprometen ni vinculan bajo ninguna responsabilidad a la sociedad comercial controlante del medio de comunicación, ni a su editor, toda vez que en el libre desarrollo de su profesión, pueden tener opiniones que no necesariamente están acorde a la política y posición del portal
Fundado hace 27 años, Analitica.com es el primer medio digital creado en Venezuela. Tu aporte voluntario es fundamental para que continuemos creciendo e informando. ¡Contamos contigo!
Contribuir

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba