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Pensamientos Originales

Conversaba con uno de mis hijos y le comentaba que cada vez me convencía más de que todos nuestros pensamientos ya habían sido pensados por alguien.  A mí me pasaba muy a menudo que teniendo una idea, un concepto, o algo que consideraba novedoso, lo escribía y algunos días, semanas, meses o incluso años después, me enteraba de que  alguien hacía poco  o hacía siglos o milenios ya había dejado plasmado algo parecido o incluso, había utilizado las mismas palabras que yo había usado para explicar una idea.  Si todo está en movimiento y todo tiene un origen, a lo mejor ya todo ha sido dicho y lo que hacemos es repetir, reaprender y reescribir.

Mi hijo me contestó que si yo no conocía lo que se había dicho antes, mi pensamiento era original.  ¿Cuántos originales podia haber, me pregunté?

Es impresionante pensar en todos aquéllos que existieron, que dijeron, que explicaron, que pensaron, que analizaron, que hicieron.  Es interesante darse cuenta de que, a pesar de todos los siglos y milenios transcurridos, todavía aprendemos de lo antiguo.  Todavia nos sirven de referencia personas que habitaron hace milenios.  Todavía nos sorprendemos ante los conocimientos sobre los astros, la arquitectura, las obras de quienes vivieron hace milenios.

Me pregunto si en alguna parte están todos los pensamientos almacenados y si nuestro cerebro, o tal vez nuestra alma, tiene la capacidad en momentos determinados de accesar esos archivos del universo, conectándose con esa biblioteca que ya existe para tomar información y procesarla o compartirla en el momento oportuno.  A lo mejor las lecciones se repiten en el tiempo porque los alumnos cambian y hay que volver a empezar desde cero, como el professor que empieza cada año escolar con un nuevo grupo de alumnos.  Ellos tienen que aprender la materia.  Si están adelantados, les será más fácil pasar el curso.  Si les cuesta, puede ser que tengan que repetirlo.  Cada quien irá a su paso y cada quien aprenderá o dejará de aprender.  Cada quien decidirá después cómo utiliza lo aprendido en su recorrido.

Pensemos…Pensemos…Pensemos…Tenemos esa capacidad de pensar, de analizar, de profundizar…Sea que nuestros pensamientos sean originales o no lo sean, pensemos utilizando nuestra conciencia y dispongámonos a compartir esos pensamientos con otros dispuestos a pensar.  El intercambio de pensamientos ayuda al discernimiento y mientras nuestro pensamiento sea libre, nosotros seremos libres.

!Prendamos una vela y pasemos la luz!

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