La «albanización» de Venezuela es una advertencia que debería movilizar a la comunidad internacional

El Foro de Analítica TV «La Albanización de Venezuela», reunió a destacados juristas y exdiplomáticos, entre ellos Milos Alcalay, Milagros Betancourt y Víctor Rodríguez Cedeño, para analizar los paralelismos entre el aislamiento diplomático y político que enfrenta Venezuela y el que vivió Albania bajo la dictadura de Enver Hoxha. Este evento expuso cómo la radicalización y las políticas internacionales del régimen venezolano amenazan con transformar al país en un «estado renegado» al margen del sistema internacional.
Uno de los puntos clave fue el enfoque de Milos Alcalay, quien comparó las estrategias de confrontación de ambos regímenes. Hoxha, aislado por romper con aliados tradicionales y atacar incluso a naciones comunistas, condenó a Albania a la pobreza y el atraso. Venezuela, argumentó Alcalay, sigue un camino similar con su rechazo a las normativas internacionales, el irrespeto a tratados y su constante enfrentamiento con aliados potenciales. Este aislamiento autoimpuesto se traduce en un impacto devastador para los derechos humanos y las condiciones de vida de la población.
Por su parte, Milagros Betancourt resaltó la descomposición de la diplomacia venezolana, subrayando cómo la ruptura de principios como la buena fe, la cooperación y la reciprocidad en las relaciones internacionales ha aislado al país. Betancourt explicó que decisiones unilaterales, como la reducción arbitraria del personal diplomático extranjero, reflejan una estrategia errática que afecta tanto a ciudadanos nacionales como a extranjeros.
Víctor Rodríguez Cedeño enfatizó que las violaciones sistemáticas al derecho internacional y a los derechos humanos no solo desacreditan al régimen, sino que también refuerzan su imagen como un estado forajido. Señaló el incumplimiento de tratados internacionales, la complicidad en actividades ilícitas y la manipulación de instituciones internacionales como la Corte Penal Internacional. Este contexto, advirtió, incrementa las sanciones internacionales y limita cualquier posibilidad de desarrollo económico o reintegración global.
El foro concluyó con un llamado a reflexionar sobre las implicaciones de este aislamiento progresivo. La destrucción de instituciones internas y el desprecio por los compromisos internacionales no solo afectan a Venezuela, sino también a la estabilidad regional. La «albanización» es una advertencia que debería movilizar a la comunidad internacional y a los actores nacionales a buscar soluciones antes de que el aislamiento sea irreversible.
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