¿Quién eres, Nicolás?

Después de ver y escuchar durante varios días a Nicolás Maduro (un ejercicio que los comunicadores tenemos que hacer para tratar de entenderlo), estoy más seguro que nunca que ese hombre definitivamente no es Chávez. Valga aquí la confesión, debo decir que extraño a Chávez, y creo que la mayoría de la oposición también lo extraña.

Chávez era un tipo con una personalidad magnética, cantaba, bailaba, echaba cuentos, le decía a su esposa que le iba a dar lo suyo e impulsaba a las mujeres embarazadas a darle la teta a sus muchachos. Además de un sinfín de cosas con las cuales se podrían escribir tomos de libros de humor. Sí, ciertamente Hugo Chávez no fue un buen presidente, pero era un tipo memorable. Todo lo contrario a Nicolás Maduro.

Maduro lo sabe y por eso no se despega del recuerdo de su comandante. El mejor jefe de campaña que puede tener el actual presidente encargado es el presidente fallecido. Maduro recibió un gran impulso de parte del «líder supremo de la revolución bolivariana» y aún no se ha dado cuenta de que vive y vivirá bajo su sombra (o a lo mejor sí se dio cuenta y estar a la sombra de Chávez es lo que le gusta).

Es triste. Es triste porque me gustaría ver una campaña política de altura, me gustaría ver debates, propuestas serias y demás. Me gustaría que Nicolás Maduro fuera Nicolás Maduro y que dejará de imitar a Chávez. Me gustaría saber si es posible que articule un discurso sin mencionar a Chávez. Es más, debería ponérselo como un reto personal.

¿Cómo eres, Nicolás? ¿Qué te gusta? ¿Practicas algún deporte? ¿Te vacilas las películas de Sean Penn? ¿Cómo te sentías en tu grupo de rock? No voy a votar por ti, eso lo tengo muy claro, pero sería chévere ver al verdadero tú en campaña y no a un mal imitador de Chávez.

 @andy_schmucke