Florencia, la ciudad Toscana
Quien no haya ido a Florencia, se ha perdido la oportunidad de conocer una de las ciudades más bellas, llenas de historia y de arte en el mundo entero.
A pesar de no ser muy grande, hay que disponer de tiempo para conocer sus tesoros artísticos, que van desde una arquitectura fabulosa hasta algunos de los mejores museos.
El primer impacto al visitar la ciudad es el Ponte Vecchio, un puente medieval sobre el río Arno, aunque se presume que fue construido inicialmente por los romanos. Desde tiempos inmemoriales ha sido un sitio de comercio, particularmente de joyería.
Como dato curioso se dice que el término bancarrota proviene de este lugar, debido a que cuando un vendedor no podía pagar sus deudas, su mesa, o puesto para la venta, era rota por los soldados: banco+rotto. Al no disponer ya de una mesa, el comerciante no podía vender sus mercancías.
Ya dentro de la ciudad, lo primero que hay que ver es la Piazza del Duomo.
Allí puede encontrar: la Catedral Santa María de las Flores, que es uno de las obras maestras del arte gótico y del primer renacimiento italiano. Destaca la gran cúpula, obra del arquitecto Filippo Buneleschi.
El campanario del Giotto, que fue proyectado por este gran artista pero la concluyó Andrea Pissano.
El Baptisterio de San Juan, situado al oeste de la catedral y famoso por sus tres puertas de bronce. Son de excepcional belleza las puertas del paraíso de Ghiberti.
Otro lugar fantástico es la Piazza della Signoria, que es la plaza central y en la que está el Palazzo Vecchio.
La logia de la señoría.
El tribunal de las mercancías.
El palacio Uguccioni.
Y las estatuas.
No puede dejar de ver el David de Miguel Ángel, una impresionante escultura en mármol blanco de 5,17 metros de altura que estuvo inicialmente destinada a la catedral Santa María del Fiore. Hoy se puede visitar en la galería de la Academia de Florencia.
Entre los lugares en los que se pueden admirar extraordinarias colecciones de arte está el Palacio Pitti.
En este imponente palacio hay numerosas colecciones; en el llamado Piano Nobile se puede contemplar la famosa línea de arte de los Medici, que presenta obras de Rafael, Tiziano, Rubens y muchos otros grandes artistas del renacimiento.
Pero además del museo, el palacio tiene un bellísimo parque: el famoso Jardín de Bóboli.
Además de este palacio, hay otra galería de arte que es de las mejores del mundo: la Uffizi, ubicada en el palacio que comenzó en 1560 el gran arquitecto Giorgio Vassari.
La colección de arte de los Uffizi es muy amplia, con fondos incluso no expuestos por falta de espacio. Entre los cuadros más famosos está “El nacimiento de Venus”, de Botticelli.
La Anunciación, de Leonardo da Vinci.
Y la Virgen del Jilguero, de Raphael.
Pero la visita no puede concluir sin ir al Piazzale Michelangelo, donde se puede ver la mejor vista de la ciudad.
Al bajar, hay que detenerse en la iglesia de la Santa Croce, que aparte de las grandes obras de arte que contiene, tiene los restos de personajes, como Galileo, Miguel Ángel, y Maquiavelo, aunque hay un monumento al Dante, no está enterrado allí sino en Ravenna.
Otra visita obligada es el Mercado de San Lorenzo.
En Florencia se come muy bien y una de las especialidades es la pasta e fagioli.
En materia de hoteles, el más impactante es el Brunelleschi, en el centro de la ciudad.
