El papa Francisco califica la tortura como un pecado mortal
La Asamblea General de las Naciones Unidas en la Resolución 52/149 «proclama el 26 de junio Día Internacional de las Naciones Unidas en Apoyo de las Víctimas de la Tortura, con vistas a la erradicación total de la tortura y a la aplicación efectiva de la Convención contra la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, que entró en vigor el 26 de junio de 1987».
La tortura se entiende como todo acto por el cual se inflija intencionadamente a una persona dolores o sufrimientos graves, ya sean físicos o mentales, con el fin de obtener de ella o de un tercero información o una confesión
Al respecto, el Papa Francisco calificó esta práctica como un pecado mortal. Y es que a través de su cuenta oficial en la red social de Twitter fijó su posición al escribir: «¡Torturar a las personas es un pecado mortal! Que las comunidades cristianas se comprometan a sostener a las víctimas de la tortura»
¡Torturar a las personas es un pecado mortal! Que las comunidades cristianas se comprometan a sostener a las víctimas de la tortura.
— Papa Francisco (@Pontifex_es) June 26, 2018
También explican que con la tortura se busca castigar a la persona por un acto que haya cometido, o se sospeche que ha cometido, o de intimidar o coaccionar a esa persona o a otras, o por cualquier razón basada en cualquier tipo de discriminación, cuando dichos dolores o sufrimientos sean infligidos por un funcionario público u otra persona en el ejercicio de funciones públicas, a instigación suya, o con su consentimiento o aquiescencia. «No se considerarán torturas los dolores o sufrimientos que sean consecuencia únicamente de sanciones legítimas, o que sean inherentes o incidentales a éstas»