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¿Matazón Constituyente?

Chávez  estableció (ABM, Habla el Ctte, Ccs, 1998) que  aquí todo es una guerra para destruir lo existente. Por ello, el actual llamado a Constituyente es otro capítulo de la guerra-violencia golpista-chavista. ¿Pero qué explica que 18 años después  la desesperación amenace la revolución?

El despilfarro en el pago de tarifas a los acólitos de la revolución,  el fracaso  productivo,  la escasez-hambre actual,  la baja de precios del petróleo y de la importación de alimentos lleva a la radicalización del proceso como fórmula salvadora. ¿Pero cómo se llega a este punto?

En un inicio la revolución controla las instituciones. La única opositora, la Asamblea Nacional (AN) estaba neutralizada por desacato. Pero el 28 y 29/04 el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) produce dos sentencias que quitan funciones e inmunidad a diputados de la AN. ¿Por qué se formaliza lo que se cumplía en la práctica? ¿Equivocación? ¿Actuó el TSJ al margen de las instrucciones supremas?

De inmediato, la AN acusa al TSJ de golpista. La MUD convoca una protesta de calle para el 04A-17. Pero inesperadamente, el 31Mar-17, la Fiscal General de la República (FGR) acusa al TSJ de violar la Constitución. Entonces Maduro hace mediar el Consejo de Estado para el retiro y corrección de las ponencias. La FGN no insistió en el asunto. ¿Ya no se viola la Constitución-Estado de Derecho?

En un clima explosivo la oposición toma la calle. El 06A es asesinado Javier Ortiz en Miranda. Desde entonces un nuevo ciclo de  muerte que en cifras extraoficiales ya alcanza las 50 víctimas.

El sujeto principal de las protestas es el joven tomado por la desesperanza y que asume  esta terrible y desafiante consigna: ¡A mí no me importa que me maten luchando contra este gobierno! Y agregan: “Igual me puede asesinar la delincuencia en cualquier momento”.

Estos muchachos no creen en gobierno ni MUD ni siguen dirigentes. No saben ni les interesa la formación política e ideológica o la organización.  Luchan  contra la GN y la PNB y todo lo que sea represión. Es el cambio de piedras, lanzada con mucho arrojo, valor, desprendimiento, emoción contra bombas o balas. Acción desigual  en la cual se impone el crimen.

Y en medio de esta guerra el gobierno plantea una Constituyente  que al calificar de originaria (CO) que es, por definición, para la transformación del Estado con su Asamblea y demás instituciones. Un Estado que garantizará al capital global sus beneficios petroleros, arco-mineros y de deuda. ¿Independencia, soberanía y libertad o  sometimiento neo-colonial?

Pero el discurso de la dirigencia gubernamental y PSUV hablan de CO por y para el restablecimiento de la paz y para blindar la Constitución y llevar a su articulado las instituciones creadas en revolución. Se habla en este caso de reforma aunque lo planteado en el fondo es la instauración del Estado Comunal y la República  Bolivariana y Comunal de Venezuela (RBCV) que significaría la radicalización del proceso revolucionario sobre otras bases y leyes.

Atrás quedó ya la AN. Y la CO puede tomar medidas, por ejemplo,  sobre un nuevo sistema electoral que no sabemos a que nivel podría poner esta guerra.

Por eso a esta hora el grito polarizado sube. Las oposiciones sostienen que la CO no es ni querida por la mayoría del pueblo y que el CNE debe hacer la respectiva consulta. Para el gobierno eso no procede por no estar establecido en la CRBV.

Si  se asume que estamos ante una dictadura militar-policial-narco-delincuencial-civil está claro que la constituyente será convocada por el CNE.

La situación es muy dura, difícil. Porque si la mayoría MUD se opone  a este llamado a CO y la revolución no se devuelve a hacer las elecciones pendientes y entregar el poder, iremos indefectiblemente hacia una matazón cada vez mayor.

¿Y podrá mantenerse el engaño del Estado Comunal como otra forma de enriquecimiento del poder del momento? La violencia desatada y la carencia de estructuras ideológica-políticas, organizacionales y productivas no lo permitirán.

La implosión impulsada por la ineficiencia y las contradicciones entre poderes-ambiciones internos actuarían de nuevo. Y esto tendría un costo muy lamentable: Se llegaría al más profundo  hundimiento de este expaís. Y será muy largo el tiempo necesario para planificar y construir un país. Las negociaciones con ayuda de las partes internacionales interesadas podrán contribuir al logro de este fin.

Y en el camino, como registro de un gran pesar que no conmueve a muchos,  habrá quedado  escombros de todo tipo y muchas vidas. Por ello decimos, Sancho, que en nombre de ninguna causa  convalidamos que se siga lanzando muchachos a exponer la vida!

@ablancomunoz

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