Argentina: hoy se reúne el Gobierno con las entidades agroganaderas
El campo reclamará soluciones para la ganadería, sobre todo la normalización del Mercado de Liniers. Si no hay acuerdo podría anunciarse un nuevo paro.
La tensa relación entre los representantes del campo y el Gobierno argentino tendrá un nuevo capítulo este miércoles 11 de abril, cuando las autoridades de las cinco entidades que nuclean a los productores agropecuarios se reúnan con el Jefe de Gabinete, Alberto Fernández, en la Casa Rosada.
Se descuenta que acudirán los máximos responsables de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Federación Agraria (FAA), Confederaciones Rurales (CRA), CONINAGRO y del Frente Agropecuario Nacional (FAN). Del lado del Gobierno podrían estar presentes la ministra de Economía Felisa Miceli y el secretario de Agricultura Javier de Urquiza.
En el último encuentro entre dichas partes, que tuvo lugar el pasado viernes 30 de marzo, no hubo acuerdo en ninguno de los puntos presentados por los ruralistas, sobre todo en aquellos relacionados con las problemáticas del trigo, la ganadería y el endeudamiento de los pequeños productores con el Banco Nación.
Sin embargo, las promesas de los funcionarios para analizar esos temas y encontrar posibles soluciones calmaron a los dirigentes, al menos por unos días, y evitaron que éstos anunciaran lo que, desde hacía algunas semanas, venía madurando: la realización de un nuevo paro agropecuario contra el Gobierno de Néstor Kirchner.
Para la nueva reunión se prevé que se discutan temas estrictamente relacionados con la ganadería, aunque teniendo en cuenta las exigencias que las bases tienen para con sus representantes, no se descarta que entre en la agenda de las negociaciones las cuestiones vinculadas a otros sectores productivos.
La carne será el eje de la reunión
La normalización del Mercado de Liniers será el reclamo insignia de las entidades hacia la administración nacional. Los dirigentes están fuertemente enfrentados con el Secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, ya que afirman que con su imposición de precios de referencia para evitar la inflación ha alentado al comercio en negro y ha perjudicado aún más a los productores, para seguir beneficiando a los grandes participantes de la cadena, como los frigoríficos.
“Era el momento de sincerar esa situación, pero habrá que discutirla con Moreno”, dijo en aquella oportunidad Luciano Miguens, titular de la Sociedad Rural Argentina (SRA). Pero en los días que pasaron desde aquella conversación hasta la que tendrá lugar hoy, no hubo avances en el diálogo entre Moreno y los ruralistas.
“Todas las partes coincidimos en la preocupación por no detener los procesos productivos, así como también en que no haya un incremento de la inflación, pero el Gobierno tiene deberes que cumplir: resolver los problemas de los productores, en especial de los criadores”, señaló Eduardo Buzzi, Presidente de Federación Agraria.
Pero no sólo por la casi nula relación entre Moreno y las entidades el panorama no es alentador: teniendo en cuenta que todos los anuncios oficiales de los últimos dos meses vinculados al agro no se han efectivizado (el ejemplo más notorio son las compensaciones al sector, que siguen sin cobrarse), puertas adentro de las entidades hay una sensación de que se transita, de nuevo, hacia una medida de fuerza de alcance nacional, tal como se diera en diciembre del año pasado.
La cintura política que tengan los funcionarios para evitarlo y la poca o mucha elasticidad en el proceso de diálogo que sigan mostrando los ruralistas serán, al fin y al cabo, los factores que determinen lo que sucederá en el corto plazo.
