El voto bronca ganó en Argentina
Voto bronca: quedó segundo y fueron casi cuatro millones
Los votos blancos y nulos se quintuplicaron frente a la elección del 99. Sumados, superaron en todo el país a los de la Alianza. Fue primera fuerza en Santa Fe, Capital, Río Negro y Tierra del Fuego
WALTER CURIA
Marca récord en Santa Fe
Un mensaje con certezas y varios interrogantes abiertos
La Alianza y el PJ, aunque ganó, sufrieron fuerte pérdida de votos
TN: habla el presidente de la Nación, Fernando de la Rúa.
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Tres millones ochocientos setenta y un mil doscientos once. Son los argentinos que se libraron de todos los prejuicios de la transición democrática y votaron en blanco o impugnaron su voto. El voto bronca o negativo fue la expresión de insatisfacción de más del 20 por ciento de los que votaron el domingo y llegó segundo en todo el país.
La elección la ganó el peronismo, sobre eso no puede haber duda. Obtuvo más de cinco millones y medio de votos, se impuso en 17 de los 24 distritos del país, seguirá siendo mayoría en el Senado y será la primera minoría en Diputados. Con cuatro dirigentes «presidenciables», es cuando menos la opción de alternancia.
Todo esto debería ser garantía del sistema, y lo es. Entre las innumerables dudas que deja la aparición de un fortísimo voto negativo y de desafío colectivo aparece una obviedad: los argentinos han encontrado una vía de reacción ante la falta de respuestas de su clase dirigente dentro del sistema democrático y no fuera de él, como ha sido en su larga historia de tragedias. Contra lo que propone el esquema de distribución económico y social dominante, el voto bronca no resulta de una actitud de exclusión, sino más bien es inclusivo, porque demanda participación.