Migrantes venezolanos arriesgan sus vidas cruzando el Río Grande para llegar a EE.UU
La crisis migratoria venezolana sigue estando en la palestra pública, ayer las redes sociales se encendieron al compartir una imagen en la que se puede observar un joven llevando a cuestas a una anciana cruzando el Río Grande, que separa los Estados Unidos de México.
A diario son miles los criollos que cruzan ese río, todo ello en busca de un futuro prometedor, ese que la crisis política, económica y social que ha generado la denominada “revolución” le ha arrebatado a millones de venezolanos.
La anciana, que según datos obtenidos por algunos medios de comunicación lleva por nombre Irma, logró llegar sana y salva al otro lado del río y representa una de las caras más recientes del éxodo venezolano.
La nación sudamericana bajo la administración de Nicolás Maduro, ha ocasionado que más de 5,6 millones de connacionales hayan tenido que tomar la decisión de dejar su vida atrás en busca de mejores condiciones y un futuro prometedor. A pesar de lo exuberante de la cifra, cada día son más y más los criollos que siguen abandonando el país, ya superando en números al éxodo sirio.
La fotografía que fue publicada este jueves por el corresponsal de Reuters Idrees Ali, generó todo tipo de reacciones a través de las redes sociales.
«Un migrante venezolano que busca asilo lleva a una anciana mientras cruzan el río Grande hacia Estados Unidos desde México«, explicaba el periodista sobre la imagen.
En tanto el autor de la imagen, Go Nakamura, capturó varias fotografías de esta anciana, una de ellas cuando se le ve acompañada por un agente fronterizo de los Estados Unidos.
La imagen causó revuelo porque puede observarse a la mujer ataviada de mascarilla y una suéter rosado, muy agotada, quien le da la mano a un hombre mientras se deja caer sobre uno de los agentes.
Sobre Irma es muy poco lo que se sabe. Ella asegura ser oriunda de la ciudad de Maracaibo y contaría con 80 años de edad.
Irma es un ejemplo de fortaleza, dado que a pesar de su gran edad empleó toda su fuerza para lograr pasar la frontera e ir en busca de una vida mejor. Ella al igual que cientos de venezolanos han expuesto su vida no solo para llegar a Estados Unidos, sino también a Colombia, Chile y Ecuador, por solo nombrar algunos países.
Todas las imágenes tomadas en Río Grande, Texas, suman escenas emotivas y que ya casi forman parte de la cotidianidad en este lugar del mapa. Mujeres que ayudan a cruzar a sus hijos pequeños, hombres que lloran, agotados, familias que se dejan caer sobre la hierba para coger aliento y seguir su camino.
