Todo listo para la cumbre energética
En la turística isla venezolana de Margarita hasta las palmeras -envueltas en las afueras del aeropuerto para mantener su frescura- están preparadas para acoger este lunes la I Cumbre Sudamericana de Energía, que será custodiada por unos 5.000 policías.
Bajo el lema «Por la unión del Sur», acudirán 11 mandatarios sudamericanos, entre ellos, los presidentes de Argentina, Brasil, Colombia, Bolivia, Chile, Ecuador y Venezuela.
El único jefe de Estado de la región que no estará presente es el presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, que será reemplazado por el vicepresidente, Rodolfo Nin Novoa.
En la cumbre, que se celebrará hasta este martes, se discutirá cómo conseguir una mayor integración energética y garantizar así las necesidades de energía en la región.
Se hablará sobre la propuesta de Venezuela de crear una «OPEP del Gas» a escala mundial y se debatirá la creación del Gran Gasoducto del Sur, que unirá la Faja del Orinoco venezolana con la Patagonia argentina y que requiere una inversión de US$20.000 millones.
Brasil y Venezuela ya acordaron el pasado enero impulsar el primer tramo de este inmenso proyecto, Güiria-Recife, a terminarse en 2012.
Pero el tema estrella se prevé que sean los biocombustibles y el etanol, cuyo segundo productor mundial es Brasil.
Polémica
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, defiende el etanol como alternativa «verde» al petróleo, pero Venezuela y Cuba han criticado duramente este producto ya que, según ellos, desviará tierras de producción de alimento para producir caña de azúcar, ingrediente básico del etanol.
Fuentes de las cancillerías brasileña y venezolana, sin embargo, señalaron a BBC Mundo que ambos presidentes se reunirán por separado para intentar resolver sus diferencias, evitando que este contencioso sea aprovechado por EE.UU. para crear una cuña entre Venezuela y Brasil.
EE.UU. y Brasil sellaron un acuerdo en marzo para promover la producción y consumo de etanol que diversos analistas afirman está motivado por la voluntad de Washington de aislar al gobierno venezolano.
En vísperas de la cumbre, el canciller brasileño, Marco Aurélio Garcia, ya advirtió en un medio local contra convertir las opciones energéticas de su país «en escenario para discusiones político-ideológicas, como si estuvieran configurados dos campos opuestos en las Américas».
Ahora Venezuela parecería coincidir con este parecer, y buscaría llegar a un entendimiento con Brasil.
Finanzas
Pero la integración energética y el etanol no serán los únicos grandes atractivos de la cumbre. Una importante novedad es que el establecimiento del Banco del Sur seguramente cobrará más relevancia de lo esperado.
El proyecto, que no figuraba en la agenda original, fue impulsado inicialmente por Venezuela y Argentina para financiar proyectos de desarrollo, dando la espalda así al Banco Mundial (BM) y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
A esta propuesta se han añadido Bolivia y Ecuador, y recientemente se consiguió el apoyo de Paraguay y, más importante todavía, Brasil.
No es de extrañar que el día antes del comienzo de la cumbre, Venezuela anunciara que había liquidado todas sus deudas con el BM y el FMI.
Además hay gran expectación ante lo que pueda surgir de diversos encuentros bilaterales paralelos a la cumbre.
Los medios venezolanos destacan especialmente el encuentro previsto entre el presidente venezolano, Hugo Chávez, y su homóloga chilena, Michelle Bachelet, después de que éste arremetiera contra el Senado chileno por solicitar a la presidenta que protestara ante la Organización de Estados Americanos (OEA) por el inminente cierre una televisión privada venezolana.
Lea también: Chávez pide «disculpas»
