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Covri: Inconstitucionalidad de la Ley de salud es una decisión política

Kenneth Ramírez, presidente del Consejo Venezolano de Relaciones Internacionales (Covri), considera que la sentencia del TSJ que declara inconstitucional la Ley Especial para Atender la Crisis Nacional de Salud es otra sentencia política de las 17 dictadas por el Tribunal Supremo de Justicia contra el Poder Legislativo, en el marco de la pugna entre el Poder Ejecutivo y el Poder Judicial contra la Asamblea Nacional.

El 9 de junio, el Tribunal Supremo de Justicia alegó que la ley infringía artículos de la Constitución Nacional y permitía la usurpación de competencias exclusivas del Ejecutivo Nacional “en materia de dirección de la acción de gobierno en el ámbito de los estados de excepción, así como en materia de relaciones internacionales”, para rechazar la ley aprobada por mayoría parlamentaria que buscaba permitir la recepción de medicamentos como parte de la ayuda humanitaria hacia el país.

En una conversación telefónica con Analitica.com, el internacionalista Ramírez explicó que se trata de una decisión de un tribunal alineado con el Ejecutivo, que incluso aplaude la política exterior del Gobierno Venezolano. “Es una sentencia bastante infame que está centrada en el problema que existe entre las principales fuerzas políticas y los poderes del Estado, y no atiende el problema de fondo, que es el tema de la crisis humanitaria”, expresó.

“En el fondo es no querer reconocer ante el mundo que estamos ante una crisis humanitaria en Venezuela, es el temor a quedar desnudo ante el mundo y decir que el modelo económico ha fracasado con graves impactos para la sociedad”, sostuvo.

El rol del parlamento

La sentencia también señala que la ley propuesta implica “una cesión de parte de la soberanía del Estado venezolano a las organizaciones internacionales y países cooperantes”. No obstante, Ramírez explicó que la Asamblea, a través de esta ley, asumiría una función de intermediario, reconociendo el rol del Ejecutivo Nacional como el principal conductor de las relaciones internacionales.

“Todos los parlamentos del mundo, sobre todo en contextos democráticos, tienen una labor importante de diplomacia parlamentaria y tienen una capacidad de cooperación con algunos órganos internacionales, otros poderes de otros estados, y eso es absolutamente normal”, enfatizó el profesor de la UCV, quien recordó que el presidente anterior de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, viajó a China, Rusia, Cuba e incluso se reunió con Thomas Shannon en Haití como diplomático parlamentario o como enviado del Ejecutivo.

“La Asamblea Nacional tiene un rol evidente que según el articulado de la Constitución es distinto al del Ejecutivo Nacional, pero eso no significa que la Asamblea no tenga capacidad de interactuar con otros organismos internacionales, con otros parlamentos y con otros gobiernos”, aseveró.

Asimismo, la decisión del TSJ, que quedó en manos del magistrado Calixto Ortega, argumenta la inconstitucionalidad de la ley por “establecer mecanismos de control parlamentario de la gestión del Ejecutivo Nacional distintos a los previstos por el Texto Fundamental”.

“Resulta increíble la parte de la motivación de la sentencia que también señala que el rol de control de la asamblea solamente se limita a escuchar un informe anualmente a los ministros que pasa a ser una suerte de saludo a la bandera y del Presidente de la República una vez al año y ya está”, destacó.

Reforzar las gestiones diplomáticas

El Covri, centro de pensamiento venezolano dedicado a la reflexión de las principales dinámicas internacionales, tuvo este lunes 13 de junio un debate acerca de Unasur, la gestión de los expresidentes de República Dominicana, España y Panamá y la Carta Democrática Interamericana de la OEA en relación con la crisis en Venezuela.

En el encuentro se concluyó que la mediación de Unasur, con Ernesto Samper, no ha avanzado porque es una instancia parcializada que no permite ofrecer una hoja de ruta y garantizar un diálogo realmente efectivo.

“Es absolutamente fundamental que estas gestiones sean fortalecidas con la activación de la Carta Democrática Interamericana que, a diferencia de lo que se ha venido posicionando de parte de unos sectores en la administración pública, empieza por las misiones diplomáticas. Integrando a otros expresidentes pudiéramos tener una fórmula adecuada para iniciar un diálogo efectivo en Venezuela”, aseguró el presidente de la institución, Kenneth Ramírez.

El también doctor en Ciencias Políticas afirmó que la solución comienza con realizar el referéndum revocatorio este año para atender directamente la crisis política existente, liberar a los presos políticos, garantizar los derechos humanos y abrir el canal humanitario para que finalmente lleguen recursos y medicinas al territorio nacional.

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